34.

4.3K 227 11
                                    

Capítulo 34




A la mañana siguiente desperté con la cabeza a punto de explotar, los ojos me ardían debido a que no había pegado ni un ojo en toda la noche. De verdad estaba nerviosa, hoy nos encontraríamos con los novios y después de lo que paso con Zayn, no sé cuál será su reacción al verme ahí, organizando su boda. El día anterior la había pasado ansiosa e ida, imaginándome miles de escenas y todas terminaban mal, Jamie me había preguntado mil veces por lo que tenía pero simplemente no podía contarle nada, y si bien ella se había convertido en una muy buena amiga y le tenía mucha confianza, el contarle acerca de lo mío con Zayn complicaría nuestro trabajo y no lo permitiría. Quería patalear y gritar por todo, pero me recordaba que debía ser profesional y actuar de manera uniforme.

—¿Estas lista? — escuché el grito Jamie mientras terminaba de arreglarme, medias negras y falda de tuvo negra que me llegaba un poco más arriba de la rodilla, blusa blanca y un saco del mismo color que la falda. — ¡Alexis se nos hará tarde!

—¡Ya voy! — grité de vuelta. Salí corriendo con mi bolso y carpeta en mano y alcance a Jamie en la puerta.

—Te ves sexy, cansada, pero sexy. — menciono Jamie cuando me vio aparecer en el comedor. Y sabía que tenía razón, la noche anterior no había podido pegar ni un ojo

—No necesitas decírmelo. No dormí nada. — asintió comprensiva.

—Vamos, el chofer ya está aquí.

Bajamos corriendo hasta la calle y subimos al auto que ya se encontraba con la puerta abierta. Empezamos a reír por lo ridículas que debimos habernos visto corriendo así.

—Estoy emocionada por conocer a la Srta. Edwards, pero aún más por ver al Dios griego que es Zayn, vi sus fotos y santo padre, esta buenísimo. — solté una risa y deje de lado mi incomodidad.

—Temo que quizá te lleves una decepción con la "Srta. Edwards" puede ser odiosa, créeme. — conté. Sonreí un poco y seguí: — En cuanto a Zayn, él es... guapísimo, él superara tus expectativas.

—No puedo esperar entonces. — rio y yo con ella.

La cita de hoy seria para repasar todos los datos que teníamos así que quería pensar que todo seria "tranquilo" o al menos eso era lo que esperaba. Por el momento nuestras citas serian aquí en Londres, y hasta la siguiente semana seria cuando todos viajaríamos a Bradford para conocer el lugar donde se celebraría la fiesta.

Secretamente rogaba por que el camino fuera largo, muy largo para tratar de prepararme para verlo con ella, hablando sobre su boda, todos melosos. Posiblemente él ya sabía lo del bebé y temía que llegaran a mencionarlo, escucharlo salir de sus bocas me partiría el alma.

Llegamos a un, debo admitir, muy lindo restaurante, se veía elegante pero a la vez casual, simplemente hermoso. Jamie y yo bajamos del auto y caminamos hacia la puerta con unas sonrisas enormes, en todo el camino habíamos contado anécdotas de nuestros proyectos pasados y definitivamente tenía unas cuantas increíbles y comiquísimas.

Entramos al restaurante y mi sonrisa se esfumo, sentí mis piernas flaquear y temí por acabar en el piso, nos adentramos más y nos acercamos al hostess para que nos llevaran a la mesa reservada. Tome una profunda respiración y camine con la cabeza en alto.




Zayn.

Se me había hecho tremendamente tarde, y estaba seguro que Perrie me mataría y si no lo hacía, montaría un numerito recordándome las miles de veces que me dijo que no llegara tarde. Seguí conduciendo, iba a exceso de velocidad, rogando porque ninguna patrulla me viera y continúe siguiendo las órdenes del GPS.

Deje el auto al valet y casi corrí hacia la entrada, dije mi nombre y rápidamente me señalaron la mesa en donde se encontraba Perrie y la planeadora, o debo decir, las planeadoras. Conforme me fui acercando la silueta de una de ellas me iba pareciendo cada vez más conocida, tan conocida que mi corazón empezó a bombear sangre con más continuidad, trague saliva y observe la enorme sonrisa de Perrie al verme, se levantó y estiro su mano, pero ahora solo tenía ojos para la pelinegra que ahora se ponía de pie, era ella, no lo podía creer, Alexis, estaba aquí.

Mi ceño se fue frunciendo conforme la realidad me golpeo, y negué levemente tratando de hacer que la cara de Alexis desapareciera y la verdadera cara de esta mujer apareciera, esto solo podía ser obra de mi imaginación, una broma de muy mal gusto a mi parecer, pero no lo era, ella de verdad estaba aquí, Alexis de verdad estaba planeando mi boda con Perrie.

Ella al verme ni se inmuto, su expresión no titubeo en cambio una sonrisa profesional apareció en su rostro.

—Señor Malik, es un placer conocerlo al fin. — la joven que se encontraba a su lado estiro su mano hacia mí, y fue hasta entonces que despegue mi mirada de Alexis. Estreche su mano. — Mi nombre es Jamie Holley y ella es mi compañera Alexis Mor-

—Morgan, si y-ya nos conocemos. — la interrumpí yo, aun sujetando su mano. — Un placer Jamie. — regrese mi mirada a Alexis y ella me extendió su mano. — Alexis.

—Hola, Zayn. — saludo ella. Sin emoción alguna. Como si nada entre nosotros hubiera pasado. Pase saliva una vez más, y observe el agarre de nuestras manos cuando ella empezaba a reclamar la suya. La deje ir.

—Bien, basta de presentaciones, empecemos con lo verdaderamente importante...— dijo Perrie mientras volvía a tomar asiento. — La boda.

Alexis y su compañera Jamie tomaron asiento y yo hice lo mismo, tomando mi lugar a lado de Perrie.

—Muy bien, empecemos por lo básico, la boda se llevara a cabo el día sábado 13 de octubre del presente año, en la ciudad del novio...— me señalo Jamie. — Bradford, Inglaterra, ¿correcto?

—Sí. — contesto Perrie con una enorme sonrisa. La chica Jamie había hablado de algunos temas más que simplemente no había prestado atención, mi atención estaba entre el mantel de la mesa y la chica que amaba frente a mí.

—De acuerdo, los arreglos florales tendrán lirios, alcatraces y peonias...— hablo esta vez Alexis mientras veía su carpeta, con una voz tan fina y clara, estaba en modo profesional, había extrañado tanto su voz. Perrie iba a decir algo pero Alexis levanto la mirada interrumpiéndola antes de que siquiera dijera algo: — Incluido el ramo de la novia y las damas.

Miré a Perrie y ella sonrió complacida.

—Correcto.

Alexis seguía hablando y me sentía como idiota por no poder dejar de mirarla, de vez en cuando sentía la mirada de Perrie en mí, pero simplemente no podía hacerlo. Sentí un golpe en mi pierna y giré la mirada a la mujer a mi lado, que me miraba con el ceño fruncido.

—¿Qué? — pregunté. Alexis dejo de hablar y Perrie negó.

—Ya volvemos. — Perrie se puso de pie y me llevo con ella hasta una mesa que se encontraba sola y alejada. —¿Qué estás haciendo? Deja de mirarla.

—¿Qué dices? — pregunte haciéndome el que no entendía, pero sabía perfectamente lo que decía.

—Desde que viste a esa no le quitas la mirada, Zayn. ¿Qué mierda crees que estas haciendo? — tenía el ceño fruncido y estaba roja de coraje.

—Eso no es cierto. —mentí. Desvié mi mirada a la mesa donde nos esperaban y ambas estaban hablando y sonriendo tranquilamente. Quizá lo que ella me había dicho era verdad, solo se confundió y me veía como un amigo, quizá de verdad no sentía nada por mí.




Buenas tardeeees♥ 
Quiero agradecerles por los 600 votos en la historia, de verdad los aprecio mucho y estooooy muy feliz !!!!! ♥

Speak Now | zmDonde viven las historias. Descúbrelo ahora