- Particularmente este apartamento me parece muy hermoso. - Mark dijo abriendo la puerta.
Pronto entraron y comenzaron a andar por todas las habitaciones. Habían pasado dos horas desde que Katherine había dejado la empresa con Mark para mirar a los apartamentos. Su jefe le pidió personalmente para mostrar sólo los mejores lugares en New York.
Después de visitar casi 10 apartamentos Katherine todavía no parecía satisfecha. Aún no habían encontrado el lugar perfecto.
- No pareces entusiasmada Katherine. - Dijo Mark. Ella miró alrededor de la habitación.
- Todos son hermosos, pero falta algo.
- Bueno, William me dijo que le mostrará los mejores apartamentos en la ciudad. ¿Por qué tú no me dices exactamente lo que quieres? si no yo no puede ayudarle.
- Me siento más segura en un lugar pequeño y acogedor. Con el máximo de dos dormitorios... ¡Ah! Yo no sé muy bien lo que me gusta... - dijo con impaciencia.
- No te preocupes, creo que conozco el lugar perfecto para llevarte.Katherine sonrió no muy animada y sin mostrar los dientes. Los dos entraron en el ascensor y Mark condujo a la 14th Avenue. Después de ascender a la 8ª planta, abrió la puerta del apartamento y ella abrió una amplia sonrisa.
Después de buscar por todos los lugares, Katherine no tenía ninguna duda de que este sería su nuevo hogar. Con colores en beige, maderas con unos tonos más oscuros, era agradable y acogedor y ella no pensó dos veces antes de aceptar quedarse con ese.
Después del almuerzo Katherine volvió a la empresa, pasó unos minutos hablando con William sobre el apartamento y sobre Piero. Cuando regresó a su escritorio, no podía dejar de pensar en lo que podría estar pasando en su casa en ese momento, pensando cómo sería la situación en torno de ese barrio después de ver las fotos de su padrastro y su amante esparcidos por la calle, pero pronto volvería allí, pero sólo para recoger sus cosas. No podía mudarse hoy, así que pasaría la noche en el hotel más próximo y llevaría sus cosas a su nueva casa a la mañana siguiente.
Justo a tiempo Katherine dejó la compañía y tomó un taxi para ir a su casa por la última vez. Ella se subió al coche e indicó la dirección al amable caballero que dirigía. A pocas cuadras antes de llegar a la casa ella tenía todo resuelto en su mente.
- Señor ¿me puede esperar después? Voy a coger algunas cosas y necesito ir a un hotel.
- Sí, no hay problema. - El conductor dijo con una sonrisa. - ¿Usted necesitará ayuda?
- Gracias, pero yo creo que no. Son pocas cosas.
- ¿Qué está pasando allí? - Dijo el conductor aparcando el coche y Katherine salió sorpresa.La calle estaba bloqueada justo en frente de la casa Katherine. Varias personas estaban alrededor charlando mientras observaban la casa. Cuando se acercó, su hermana y su novio la viran y se acercaron a ella.
- ¡Katy!
- Hola Eve. ¿Qué está pasando aquí?
- Era lo que iba preguntarte. Esa foto fuiste tú quien sacaste ¿no es así?
- Sí.
- Reporteros están aquí, filmado todo... Hace media hora que nuestra madre está en casa con la policía y tú no sabes el tamaño de toda la confusión...La hermana de Katherine dejó de hablar por un grito que escucharon distante.
- ¡Puta! ¡Te mato! - Eric gritó andando en su dirección, pero pronto dos policías lo tomaron y uno lo puso en un coche.
- ¿Por qué la policía está aquí?
- Poco después de que te fuiste nuestra madre vio las fotos esparcidas por la calle. Ella se volvió loca y Eric tuvo que huir. Hace poco él entró en la casa y trató de hablar con nuestra madre, pero ella casi lo mató con un cuchillo...
- Tuve que llamar a la policía... - dijo Jordan. -... Estaba tan furiosa que podría lastimar a nosotros también.
- ¿Por qué le tomaste esta foto Katherine? - Le preguntó Eve.
- Porque nadie lo creería si dijera. Yo no haría nada, pero Eric me dio un puñetazo. - Ella recogió el pelo y les mostró el hematoma. La boca de Eve formó un "O" perfecto. - Acabo siendo mi venganza.Katherine internamente sintió satisfacción, era casi difícil de ocultar, incluso una persona algo sínica como ella. Ella miró más un poco de todo el alboroto allí hasta que un policía se acercó.
- ¿Usted es la señorita Katherine?
- Sí, yo misma.
- Tenemos que hablar.
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¿Cuánto Cuesta el Amor? |Piero Barone| Libro 1
RomanceLo que hice fue algo que duele mucho más que una mentira, algo que hiere mucho más que una apuesta. Piero Barone era un hombre serio y diferente de cualquier otro que he conocido... Prácticamente perfecto. Su único defecto: Se iba a casar y fue cuan...