El Cambio De Mi Vida [Gerard Way]

Cap#37

  Decidimos ir a cenar para celebrar, obviamente la estúpida de Michelle se invito sola.

Nos sentamos en una mesa algo cerca de la ventana que daba una vista espectacular desde allí arriba, se podían ver muchos edificios y el sol brillando en el cielo.

- Oigan y... ¿Cuanto llevan juntos? - pregunto Frank rompiendo el silencio.
- Se lo pedí anoche - sonrió Gerard - Pero ya estábamos saliendo como por dos o tres meses, lo demás solo fueron encuentros y todo eso... - bebió Gerard.
- Y ayer lo hicieron, se les podía escuchar desde la otra habitación - dijo Michelle y Gerard se atoro con un sorbo de agua. Comenzó a toser y lo golpee suavemente en su espalda. Frank se llevo un bocado a la boca incómodamente, pero siguió en lo suyo como si lo que hubiera dicho Michelle no se hubiera dicho jamas.
De verdad que odio a esta tipa.

Nos encontrábamos en nuestra habitación, Frank estaba preparando una película en el reproductor para ver. Me senté en la cama junto a Gerard y el me abrazo. Luego Frank se sentó a mi lado y la estúpida de Michelle se sentó al lado de Gerard. Obviamente.

Unos cuantos sustos por la película hicieron que me prendiera como una pulga a Gerard.
De pronto otro susto y Michelle se le aferro a Gerard. Y en ese preciso momento se hizo presente mi mal humor, bienvenido sea.
Termino la película y Frank encendió la lampara de la mesa de noche.

- Eh visto mejores - comento Frank mientras sacaba la película y la colocaba en su cajita.
- A mi si me asusto - dijo Michelle riendo y suspiro.
- Si, si, como sea - dije sentándome en la punta de la cama de brazos cruzados.
- ¿Que pasa? - me susurro Gerard sentándose a mi lado.
- Nada - respondí seca.

Luego de un buen rato Michelle se fue de la habitación y Frank a la media hora después.
Dejándonos a Gerard y a mi a solas.

- ¿Que te pasa linda? - pregunto riendo mientras cerraba la puerta.
- ¡Oh Gerard! ¡Tengo miedo! ¡Abrázame! - imite la voz chillona de Michelle y lanzo una pequeña carcajada.
- Oh vamos... ¿Cuantas veces son necesarias para hacerte caer en cuenta que solo me importas tu y nadie mas que tu? - se acerco a mi rostro.
- ¿Sabes? - dije con voz seductora mientras mi dedo indice paseaba por su pecho.
- ¿Que? - pregunto con una ligera sonrisa picara en sus labios.
- Lo de anoche me gusto... y mucho - mordí mi labio inferior y el me miro a los ojos.
- ¿A si? - me pregunto apegandome a el.
- Mmm... si - gemí y baje mi mano a su miembro, suspiro y comenzó a desabrochar los botones de mi blusa - ¿Pero sabes? Tengo sueño - le guiñe un ojo y me lance en la cama rebotando una sola vez sobre el colchón.
- ¿Oh enserio? - maldijo y mire su entrepierna, tenia una ligera erección.
- Lo lamento cariño, es que tengo miedo - dije haciéndole recordar a la estúpida de Michelle.

Si quieres jugar cariño, te advierto que perderás.