Stydia Oneshots <3

Just a kiss

Situación: el viernes pasado, Lydia, Stiles y compañía fueron a una fiesta en casa de Danny, donde, con unas copas de más encima, Lydia acabó besando a Stiles. A lo largo del fin de semana, Stiles ha estado intentando hablar con ella por teléfono para aclarar lo sucedido, pero ella no le contesta a las llamadas ni a los mensajes. Sin embargo, el lunes por la mañana, cuando todos llegan al instituto, Lydia se comporta como si nada hubiera pasado y no parece darle importancia al beso. Stiles se enfada con ella por haberle ignorado y ahora hacer como si nada, así que acaba gritándole en medio del pasillo. El profesor Harris los oye discutir y los castiga a quedarse una hora después de clase.

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No I don't wanna mess this thing up
No I don't wanna push too far

~ Just a kiss

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-Dentro de una hora volveré -dijo el profesor Harris. -A ver si este rato de castigo les sirve para recapacitar lo que se puede y no se puede hacer en el colegio.

El profesor cerró la puerta tras de sí y dejó a Stiles y Lydia a solas en el aula de castigo. Debían hacer una redacción sobre por qué no se debe discutir en los pasillos de la escuela, lo que para Lydia era pan comido. En diez minutos había acabado, así que se dedicó a limarse las uñas. Cinco minutos más tarde, Stiles también había acabado. Lydia miró su redacción y sonrió.

-El truco de hacer la letra grande para ocupar más siempre funciona, ¿no? -le dijo mirándole.

Stiles levantó la vista hacia ella y alzó las cejas. Después de haber acabado gritándole en el pasillo, no podía creer que la chica no entendiera que no quería hablar con ella. Le molestaba que él hubiera intentado contactar con ella los últimos dos días sin éxito y ahora ella hiciera como si nada hubiera pasado desde el viernes por la tarde.

Negó con la cabeza y se levantó de su asiento para alejarse de Lydia. Se acercó a la ventana, donde apoyó las manos sobre la repisa y se quedó mirando hacia los jardines del instituto. Oyó cómo Lydia resoplaba detrás de él, y no pudo evitar poner los ojos en blanco.

Después de dos intentos por parte de la chica por iniciar la conversación, Stiles se hartó.

-¿Por qué haces esto, Lydia? -peguntó, girándose para encararla. -¿Por qué ahora de repente sí que quieres hablar conmigo?

Por un segundo, un brillo de dolor cruzó los ojos de Lydia, pero tan pronto como había aparecido se marchó.

-Somos amigos -contestó en voz baja. -Los amigos se hablan.

-Exacto. Los amigos se hablan. Justamente eso es lo que he estado intentando hacer todo el fin de semana y tú no has hecho más que pasar de mí -soltó Stiles, enfadado.

Lydia bajó la vista y se dedicó a mirarse las manos. Todavía estaba sentada en su asiento, a una distancia considerable de Stiles.

-No quería hablar de aquello -dijo simplemente.

Stiles alzó los brazos y los movió enérgicamente.

-¡Pues yo sí que quería, Lydia! ¿Acaso lo que yo quiero no cuenta?

Lydia no contestó. En vez de eso, sacó un cuaderno de su mochila y se puso a adelantar los deberes. Stiles ya había tenido suficiente. Iban a hablar de lo ocurrido le gustase a la chica o no. Decidido, se acercó hasta la mesa donde estaba Lydia y le arrancó el cuaderno de las manos.