La última carta de Charlie

capitulo 44:

Lo admiro sorprendida por su advertencia, lo hacía más que nada para protegerme de alguna forma, pero aun así no dejaba de sorprenderme.

Asiento sonriendo buscando tranquilizarlo, se despide dándome un beso en la mejilla para caminar y cruzar la acera hasta su casa.

Me volteo y en cuanto lo hago Charlie se despega corriendo despavorido hasta mi lado, en cuanto llega abre los ojos blanqueándolos, suspirando y dejando salir la poca paciencia que le quedaba

-Gracias por invitarme- susurro metiendo mis manos en las bolsas de su pantalón

-No salió como esperaba-

-Creía que sería un poco más educada, no debió haberle dicho eso a Jase-

-Lose- dice dándome la razón -¿Él está bien?-

-Sí, no creo que le haya afectado mucho... después de todo es Jasón- digo haciendo que su nombre resaltara de la oración. Deja pasar unos segundos sin responderme

-¿Sabes lo mucho que te quiero verdad?- dice un voz baja, pasando sus manos por mi cintura para acercarme hasta una distancia diminuta. Puedo sentirlo milimétricamente separado de mí, pero aun así el calor que emana su cuerpo me hace sentir totalmente cómoda. No digo nada, me limito a admirarlo hasta que mis ojos se cansen... sus labios son perfectos, llenos, suaves de aspecto tierno y sensibles.

Sube una de sus manos y retira mi gorro lentamente, me despeina unos que otros cabellos los cuales son arreglados rápidamente, me toma de la nuca empujándome hasta que mis labios tocaron los suyos, los mueve ágilmente y de forma lenta tratando de marcar cada movimiento con perfección. Saco mis manos de sus bolsas y las subo hasta tomar también su nuca, le paso los dedos por toda la longitud de su mandíbula disfrutando de su húmedo toque. No puedo soportar más esta increíble sensación y sutilmente estiro el cabello de su nuca. Sonríe bajo mis labios profundizando el beso, no soportando la risa me despego por completo

-Había olvidado que teníamos compañía- susurro segura de que solo el pudiese escucharme

-Y por eso lo hago- admite riendo y acercándome inclusive más hacia él, une nuestras frentes y caballerosamente me da un casto beso en la frente y en la mejilla –Buenas noches-

-Buenas noches Charlie- estira sus labios sonriendo

-Lo mucho que disfruto verte pronunciar mi nombre-dice acariciando mi mejilla. Sonrío burlándome de sus palabras, eso mismo pensaba yo cada vez que sus perfectos y carnosos labios se movían pronunciando mi nombre

-Te veo mañana- le digo despidiéndolo. Nos separamos a la fuerza estirando nuestros brazos mientras Charlie caminaba, se devuelve de golpe al admirar que mi mano no lo soltaba del todo. Toma mi muñeca para acercarse y le da un beso a mi mano. Suspiro sonrojada ¡¿Es que nadie podía decirme que esto no era un sueño?!

...

-Tu novio es un encanto-

-Lo es-

-¿Cuánto llevas con él?-

-Lo suficiente- respondo cortante mientras muevo las almohadas de mi cama hasta su tendido que ya estaba adornado por una acolchonada cobija

-¿Dónde lo conociste?-

-Una amiga nos presentó- miento al instante recordando las palabras de Jasón en mi cabeza

-Qué envidia- susurra. Aprieto la mandíbula tratando de tranquilizarme empujando la almohada que se encuentra debajo de mis manos, aprovechando que no me ve la cara la imito torciendo el gesto –Chicos tan guapos no se encuentran fácilmente-