La última carta de Charlie

capitulo 2

Capitulo2:

Levanto su mano y acaricio mi mejilla quitando la gota de lágrima que antes hospedaba ese lugar. Me observaba directamente los ojos, sonrió de una forma hermosa, negó con la cabeza y retiro la mano. Recogió los utensilios y los guardo en su respectivo armario

-me imagine que todo el tiempo estaba serio profesor-comente bajándome de la camilla.

-Mi profesión me lo demanda señorita Johnson- ¿Johnson? Hace 2 segundos solo era Emma.

-Tengo que irme, espero que te sientas mejor- dijo tomando su saco y saliendo por la puerta. Me sentí confundida, camine y Salí dejando la puerta de enfermería entreabierta. Sonreí para mis adentros y seguí mi camino hacia mi próxima clase.

Charlie se comportaba de formas muy distintas, todo el tiempo se portaba amargado e ideático en clase. Pero cuando lo distinguía fuera del aula me sonreía. Ya no sabía cómo comportarme frente a él, debía ser natural, pero ¡Al carajo! Yo no sé actuar natural.

Charlie me había inscrito en un proyecto de literatura en el cual tendría que escribir un ensayo, totalmente metafórico pero objetivo. Le pregunte a Charlie porque yo estaría en ese proyecto…. Yo no era digámoslo así, la más indicada. El solo me contesto

-necesito a mi mejor equipo-

Nos reuníamos todos los viernes de 2 de la tarde a 5 de la misma, solo éramos 4 jóvenes y Charlie el maestro organizador, solo teníamos que poner atención a la explicación que Charlie hacia frente al pizarrón electrónico. Generalmente no participaba, pero a los 3 días consecutivos de ir al curso Charlie me preguntaba mi opinión y generalmente daba una opinión corta y me sentaba de nuevo en la butaca.

Llevaba ya 5 días yendo a este especial  taller y sin mis amigas esto era bastante aburrido.

Estaba en mi casa descansando de mis clases, comiendo un sándwich ya que mi madre llegaría tarde. Escuche el timbre de mi puerta sonar, baje las escaleras y la abrí. Mis ojos se llenaron de lágrimas al ver quien era la persona que me miraba expectante

-¡Alison!- susurre. No tenía palabras la extrañaba muchísimo y ahora la necesitaba demasiado.

-Había causado muchas reacción… pero el llanto, hasta el momento no. ¿Has perdido tu amor por mí?- dijo en un tono juguetón. Solo la abrase, seguía con algunas lágrimas en los ojos pero aun así tuve la fuerza para decirle –Te extrañe mucho niña-

Después del emotivo reencuentro Alison y yo platicamos de todo, y cuando digo de todo me refiero a que en realidad no le había dicho nada sobre Charlie.

-¿Recuerdas a Charlie?- le pregunte con un aire de valentía

-¿Hablas del profesor al que odias?- me pregunto de vuelta. ¿Profesor al que odio? ¿Odiaba a Charlie? Me sentí tan inferior cuando Alison formulo esa pregunta que como si me hubieran desnudado ante el público más crítico del mundo… deje mi respuesta al aire sin saber exactamente que responder.

-¿Qué pasó mientras estuve fuera Emma?-

-Sam se unió a un grupo escolar y ahora está concursando- le conteste recordando inmediatamente la situación con Sam. Alison me pidió mi teléfono y se telefoneó con Sam, mientras hablaban saque mi mochila y revise los apuntes de Charlie. Había escrito en demasía estos últimos días, pero aun así era un espacio que podía compartir con él. En clase Charlie era el mismo, a veces estaba contento pero luego de 10 segundos estaba estricto y amargado de nuevo.

Alison se retiró muy tarde de mi casa, pero aun así me hubiera gustado estar más tiempo con ella. Sentía que estas últimas horas habían pasado como agua. No quería estar sola, porque sola solo ocupaba mi tiempo pensando, y pensar significaba Charlie y Charlie significaba al fin de mi corta vida adolescente.

Mi rutina comenzó como siempre, Alison estaba más que feliz de haber vuelto al instituto. Sam volvería dentro de 5 días mas y Alison y yo estábamos más que ansiosas.

Hubo una clase que me quedo muy marcada y eso no era nada bueno

-¡Profe Charlie! Le tengo una pregunta fuera de lugar… pero es algo muy importante- Dijo Alison a media clase, todo el grupo levanto la cabeza para verla ya que todos estábamos encorvados con el trabajo que había escrito Charlie previamente

-¿Cuál es su duda señorita Alison?- le contesto Charlie sin voltearla a ver. Los compañeros agacharon la cabeza al saber quién había formulado la pregunta ya que el trabajo de Charlie era muy importante

-¿Quién es la más bonita del salón de clases?- pregunto, levante mi cabeza y la contemple con mis ojos abiertos como platos ¡¿Cómo había preguntado tal cosa?!

-Señorita Alison. Mi mejor alumna es la señorita Emma. Espero que eso conteste a su pregunta, ahora cállese y dígnese a contestar el trabajo. Y por favor no me haga perder el tiempo-

Alison le guiño un ojo y el profesor sonrió. Voltee a verlo y me miraba, estiro sus perfectos labios y sonrió de lado mostrando una perfecta hilera de blancos dientes. Me guiño un ojo y enrojecí hasta mas no poder, involuntariamente sonreí y agache mi mirada.

Cuando llegaba a casa la situación se tornaba incomoda, mi madre todo el tiempo me preguntaba cómo me sentía y yo siempre respondía con la misma oración “bien mamá”. Ella no tenía la culpa pero últimamente estaba todo el día enojada, con ganas de llorar y con ansiedad… ansiedad de no poder hacer nada con respecto a Charlie porque admitámoslo ¿Qué oportunidad pudiera si quiera rozar a su lado?