Capítulo 43: Quiero una explicación

25 14 4
                                    

-¿Cómo que el día quince? -

-Pues... ¿Hola? Estábamos hablando de nuestro cumple... -

-Zea... -

-... -

-Nacimos el día cinco, no el quince.-

-... ¡... ! -parpadeé un par de veces. -¿¡Quéee... !? -

-Como lo oyes, tú naciste el día cinco de marzo.-

-Pero... ¡No puede ser! ¿Y si de no celebrarlo se te ha olvidado cuál día es? -

-Imposible. No se me olvidaría una fecha tan importante.-

-Joder... ¿Pero quién te la dijo? -

-Mira, los ángeles al nacer sabemos siempre la fecha en la que nacimos junto con nuestro humano. Créeme, algo así sé que no se me ha olvidado. La pregunta sería más bien, ¿quién te la dijo a ti? -

-... Tío Karl.-

-... ¿Crees que él... ? -

-¿Él, qué... ? -

-¿... Se equivocaría de fecha? -

-No lo sé... Pero... Uff... Que ahora después de tantos años me digas que nací diez días antes... ¿Qué coño pasa? -

-Mm... Tu tío debe saber algo al respecto, ¿no crees? ¿Y si vamos a hablar con él? -

-Sí... Tienes razón.-

De camino a casa, no hubo ningún comentario. Ambos nos preguntábamos: ¿qué era aquel problema que nos hacía dudar sobre algo así? ¿Por qué precisamente con nuestro cumpleaños?

Al llegar a casa, arrojé la mochila en el mueble de la entrada para que me facilitara la búsqueda de tío Karl.

-Tío Karl.-pero no hubo respuesta. -¡Tío Karl! -

Nada, ni si quiera un simple sonido en toda la casa.

-Mierdaaa... Tiene que estar trabajando.-

-Vaya... -

-Sí... Vaya... -

-Pues... Tendremos que esperar.-

Viendo que no podíamos hacer nada por aquel momento, volví a la entrada para recoger mi mochila, de forma, que al levantarla vi un trozo de papel que había aplastado con su peso, apoyado sobre la madera, como si descansara sobre ella.

-¿Una nota? -me la acerqué a la vista, ya que estaba escrita con letra muy pequeña. -"Zea, ahora trabajo de 6 a 2 , lo que pasa es que hoy he quedado con Linda. Llegaré sobre las 5 . Tenéis la comida en el frigo. Firmado: Tío Karl".-

«¡Qué clásico esto de la nota! Típico de tío Karl...»

-Supongo que tiene sentido que no nos... Es igual.-

-Ah... Será como dijiste antes, tendremos que esperar.-

Nos pusimos a almorzar, realmente necesitaba un momento para "meditar", y la comida ayudaba bastante.
Lo único "bueno" que me hacía ver la situación menos amarga era que otra vez tío Karl había hablado en plural, "Tenéis la comida en el frigo"...
Después de dar unos cuantos bocados en completo silencio, al contrario que de costumbre, tenía ganas de al menos comentar lo que creía.

-He estado pensando... Que tal vez la fecha se trate de una equivocación de otro tipo... -

-¿Como que te apuntasen otro día en el hospital? -

-Sí... Justo eso, me parece más lógico.-

-Uff... Pues si es así que poca profesionalidad, joder.-

Ángel de la oscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora