-Oh, oh..., tenemos un problema...
-¿Qué pasa, Monique?
-Z-zea... Mira, el camino se divide en dos aquí. Creo que ambos llevaran hacia la cumbre, pero..., ese camino no sale en el mapa que nos han dado...
-Déjame ver... -contemplé el mapa para comprobar si tenía razón-. Mm..., pues es verdad. No está...
-Qué extraño... ¿Por qué no lo han revisado los profesores antes de dárnoslo?
-Um..., dime, ¿has llevado tú el mapa todo el tiempo?
-Eh... no. Cuando comimos lo guardé en mi mochila.
-¿Llevabas el mapa de otro lugar? Es que si te fijas, es muy distinto a donde estamos ahora.
«No tiene mucho sentido pensar si ha habido alguna confusión con un mapa que alguien llevaba, no suele pasar, pero aun así...»
-La verdad..., no lo sé-se llevó las manos a la cara y gritó-. ¿Y si nos hemos perdido por mi culpa?
-Monique, shh... Ah, no te preocupes, de todas formas nos han dicho que sigamos el único camino de grava.
-P-pero...
-¿De qué estáis hablando? -interrumpió Rick, escuchando los gritos de Monique.
Le contamos lo que sucedía, a los demás también. Ninguno le encontramos ninguna explicación. Teo tomó el liderazgo ante el asunto y propuso, al igual que yo, que nos limitáramos a seguir el sendero por donde habíamos estado caminando toda la excursión.
Tras un par de horas de calor y risas, llegamos a la cima. Al parecer, no había nadie aún, y nos lo tomamos como una victoria.
-¡Guaaau! ¡Aquí hay unas vistas increíbles! ¿No te asomas, Zea? -
-Eeeeeh... no gracias, Monique.
-Oh, no me digas que... ¿Tienes miedo a las alturas?
-... eeesto..., no exactamente... -jugueteé con mis dedos nerviosa.
-Bueno, bueno, si tienes algún tipo de traumita ya me lo confesarás... ¡Muajaja! -intentó poner una cara maléfica pero no tuvo éxito.
-Ja, ja, ja...
-¿Os habéis fijado? Allí hay un servicio público-avisó Rick.
«¿En serio? ¿Aquí en lo más alto de la montaña?»
-Oh, perfecto, tenía unas ganas tremendas de ir al baño... -dijo Celia ruborizada.
Fuimos juntos al lavabo, cada uno por su lado, obviamente.
De las chicas, Monique y yo fuimos las primeras en salir. De los chicos, Julian.-Vaya, para ir al váter sí que te das prisa-chinchó a Monique.
-Ya vale con lo de esta mañana, ¿no?
-Verás..., Monique. Una chica tan deportista y llena de vitalidad, sabe en qué momento debe ser hábil, ¿sí?
-¿Y esto a que viene?
«Verdad...»
-Pues que, de no ser por mí, un brillante Y apuesto genio en tecnología, habrías llegado tarde durante toda la primaria y la secundaria.
-Eeeh... ¿Qué? Vuelvo a decir, ¿qué tiene eso que ver con lo que has dicho antes?
-¿Quién te despertaba yéndote a buscar a tu casa?
-Pueees..., ¿tú?
-Exacto. Así que me debes muchas.
-¿Ah, sí? Permítime que reste esas "muchas cosas" que te "debo".

ESTÁS LEYENDO
Ángel de la oscuridad
Random•(Editando)• Siempre que nos hablan de la religión, pensamos en Dios, la Biblia o los demonios. Nunca me ha gustado la religión, no creo en Dios ni soy católica. Todo lo contrario, atea hasta la muerte. Si de verdad hubiera un dios todo poderoso qu...