36.NUESTRO PROPIO CAMINO

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Me desperté a causa de los primeros y suaves hilos de luz mañanera, esos titubeantes rayos de sol que habían ido avanzando e invadiendo mi rostro y que ahora me lamían con cuidado los ojos. Parpadeé y vi que estaba tumbada de lado en una cama, encarada a una pared blanca. Estiré las piernas y me giré hacia el otro lado.

Entonces lo recordé todo.

Observé el rostro de Víctor, que estaba profundamente dormido aún con el torso desnudo. Sus expresión suave y relajada resaltaba aún más la belleza de sus rasgos de aspecto inocente e infantil.

Lentamente me acerqué y presioné mis labios contra su mejilla con cuidado para que no se despertara.

Y esperé.

No sé cuánto tiempo pasó, pero está claro que el hecho de contemplar la bonita fisonomía de Víctor me entretuvo lo suficiente como para que no me resultara demasiado.

Una vez despertó, fuimos juntos a la cocina a desayunar. Justo al salir, nos encontramos a su madre, quien no disimuló su sorpresa.

-Es Leila -tembló con nerviosismo la voz de Víctor. Me había contado que ya había hablado con sus padres sobre mí, alguna vez, pero esas circunstancias eran quizás un poco violentas -. Se ha quedado a dormir, esta noche.

Su madre alzó las cejas. No supe si su gesto quería manifestar aprobación o todo lo contrario, era difícil de descifrar. Tampoco dijo nada. Simplemente tomó un sorbo de la taza de café que estaba sosteniendo con una mano y se fue hacia el salón.

Me fui rápidamente justo después de desayunar una buena y deliciosa taza de chocolate caliente.

No hacía mucho tiempo que acabábamos de volver de la gira. Pero aun así, aún quedaba mucho trabajo por hacer, ese verano.

La segunda parte de nuestro premio de Pequeñas Estrellas era grabar nuestro propio disco con la discográfica con la que habíamos firmado un contrato. Les había entusiasmado lo mucho que nos habíamos entregado en la gira, así que sus expectativas eran altas.

Según ellos, al contrario que muchos artistas y grupos con los que habían trabajado anteriormente, nosotros teníamos una personalidad fuerte y un estilo muy propio. Normalmente cada uno ya tenía un compositor personal que les escribía las canciones, ellos solo tenían que interpretarla. A nosotros no nos proporcionarían ese lujo.

Opinaban que teníamos el talento y la actitud necesaria como para componer nuestras propias canciones. Obviamente podríamos seguir tocando covers, e incluso podíamos incluir alguno en el álbum, si queríamos. Pero ya que nos veían completamente capaces de ello, querían que hiciéramos la mayor parte del trabajo nosotros mismos, aunque siempre con ayuda.

Sí tendríamos un compositor para nosotros. Pero él no escribiría canciones para nosotros. Solamente nos ayudaría teniendo en cuenta que no teníamos nada de experiencia en ello.

La verdad es que todos estuvimos bastante orgullosos del resultado. Todas la canciones eran en inglés, y la mayoría describían nuestra historia no solo como grupo de música, también como grupo de amigos.

Canciones como Forever Together, We already won, Make it through, Possibilities o, mi favorita, Our own way:

La primera estrofa:

Here we are
We got this far
Don't ever ask how
I don't even know now

LEMON HEAD (Spanish version) #Wattys2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora