Capítulo 2.

7K 353 17
                                    

El despacho de la profesora McGonagall es uno de los lugares más nostálgicos que he encontrado en mi vida, casi puedo verme a mí misma, unos años más pequeña al lado de Harry y Ron, esperando un castigo, o esas agradables tardes donde la profesora...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El despacho de la profesora McGonagall es uno de los lugares más nostálgicos que he encontrado en mi vida, casi puedo verme a mí misma, unos años más pequeña al lado de Harry y Ron, esperando un castigo, o esas agradables tardes donde la profesora amablemente me ofrecía guía en las muchas asignaturas escolares o aquella vez en tercer año cuando después de un colapso nervioso por tantas responsabilidades que tenía la profesora McGonagall me recomendó  dejar una o dos materias.

Fuera como fuera, el despacho de McGonagall era sinónimo de estabilidad, y eso era lo que venía buscando.

La mujer está sentada en su escritorio, con la cara entre las manos en un claro gesto de derrota,considero irme, pues es obvio que estoy entrometiendome en un momento íntimo, pero es demasiado tarde, la mujer ha levantado la vista y con un tono,  preocupado cuestiona.

—Señorita Granger ¿Qué ha ocurrido? ¿Están todos bien? ¿Alguien más ha muerto?

—No, No es nada de eso, profesora solo quería preguntarle algunas cosas. —Me apresuro a aclarar, la mujer se calma y dejándose caer  en su silla, toma la actitud de profesora estricta a la que estoy acostumbrada y entonces habla.

—Está bien ¿En qué puedo ayudarla señorita Granger?

Ante sus palabras me remuevo incómoda, para ser sincera no sé cómo tratar este tema y en cierta medida me aterra lo que Harry y Ron piensen sobre ello, pero yo ya he ha tomado una decisión y voy a llevarla a cabo, tal vez ellos se enojen un poco, pues estaré lejos por un tiempo pero sé que ambos están impacientes por iniciar una vida fuera de Hogwarts, pero yo... siento que todo mi mundo ha cambiado y necesito aferrarme a la única cosa que siempre ha sido una constante en mi vida.

—Profesora... sé que no es el momento oportuno, pero... puedo saber ¿Qué planea hacer con el colegio? Es decir... ¿Hogwarts abrirá sus puertas el siguiente año?

Las cejas de la mujer se juntan, está más que claro que no había visto venir esta pregunta, aun así me responde con voz segura.

—Por supuesto que si, señorita, hay demasiados niños que necesitan controlar su magia y me niego a que alguno de ellos desarrolle algún Obscurial, es demasiado peligroso un mago que no puede controlar su magia.

La palabra Obscurial es algo nuevo que no entiendo muy bien, sin embargo, archivándola para investigar sobre esto más tarde tomo una gran bocanada de aire para armarme de valor antes de preguntar.

—En ese caso yo... usted... ¿Podría considerar dejarme volver para cursar mi último año? Como sabe al ir con Harry a la búsqueda de horrocrux y...

La mujer alza una mano para pedirme silencio un momento lo que yo inmediatamente acato, tantas horas en su salón de clases y entiendo perfectamente cada uno de los gestos de esta mujer, lo que me confunde un poco es la actitud casi maternal que adopta después.

Mi Razón Para Seguir.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora