Piscis

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— Jun, creo que debería irme ya...  Necesitas descansar, has tenido un día duro — Me dijo Tristán, tomándome en brazos y llevándome al segundo piso.

— Pero Tristán, mi pieza es la que está debajo de la escalera — Le expliqué medio dormida. Siempre después de llorar me bajaba el sueño, fuera a la hora que fuera.

— Eso no es un cuarto, es un almacén... No, ni si quiera eso, es la pieza de tu gato — Dijo él entre risas, pensando que yo bromeaba.

—... ¿En serio es tu cuarto?— Insistió algo sorprendido y quedándose quieto a mitad de la escalera al cabo de unos segundos de silencio.

— Sip, es mi cuarto — Y no fue necesario decir más.

Entramos a mi habitación, me dejó tendida en la cama, besó mi frente y se marchó así sin más.

Me sentía mal por muchas cosas, acababa de enterarme de algo impactante y no sabía cuándo volvería a ver a Tristán, tenía demasiado sueño para preguntarle qué haría y dónde se quedaba... Pero la imagen de la chica "Victoria secret" me vino a la mente. De seguro que ella lo cuidaría bien...

Lo único que tenía claro era que yo no era cien por ciento humana, que todo este asunto me agobiaba y que Tristán estaría a mi lado para protegerme.