Blanquito me explico que Tristán luchaba cada año en el torneo que hacia el (falso) rey Júpiter porque al ganador se le otorgaba una cierta cantidad de "perlas", que era el dinero de ellos, para así poder hacer una tumba digna para sus dos padres. Júpiter no quiso hacerles ni la ceremonia ni mucho menos darles un entierro digno porque dijo que en sus muertes habían humanos involucrados y no lo valían.
- Además también mucha como modo de revelarse, ya que el rey le ofreció ser de su guardia personal, después de todo Tristán esta en la mejor clase de tritón, pero él siempre se ah negado y creo que no necesito explicarte los motivos, son más que obvios...-
- Si, supongo que si... Oh Blanquito no sabes lo culpable que me siento ahora... Debo volver a la superficie, ¿Crees que puedas llevarme? - Le pregunté nerviosamente, suprimiendo la tela de mis jeans bajo mis manos.
- Claro que puedo, pero será mejor que nos vayamos en la madrugada, a esta hora aún deben estar buscandola por los alrededores... Así que si gusta, puede ir a descansar al cuarto de Tristán, es el de la puerta oscura - Me indicó el tiburón y en el fondo tenía razón, el día había sido agitado, probablemente era muy tarde y necesitaba dormir un poco para aclara las ideas que rondaban mi cabeza, que no eran pocas...
Entre al cuarto y cerré suavemente la puerta con forma ovalada. El lugar era pequeño pero podía sentir la presencia de Tristán en todas partes. Había un armario de un material extraño que brillaba levemente, si cama era bastante amplia y sólo tenía una especie de alga encima, junto a esta había un pequeño mueble y el techo tenía muchas ventanas con formas muy abstractas que dejaban entrar la bella luz del exterior. No había nada en ese lugar que no me recordará a Tristán...
Avancé lentamente hasta la cama y me dejé caer suavemente sobre ella. De mi cuerpo salieron un par de burbujas y recordé que estaba bajo el mar... El inmenso y precioso mar que me pertenecía... Era demasiado abrumador para sí quieta darle vueltas al asunto.
Sin querer pensar en nada me cubrí con la extraña alga, apoye mi cabeza contra la gruesa burbuja que tenía por almohada y cerré mis ojos. Estaba en el lecho de Tristán, donde había crecido, donde había tenido una familia feliz, donde había dormido durante años... Y cerré mis ojos.
Ahh... Tristán ¿Por qué no has venido por mí todavía?
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Piscis
RandomYo, Jun Blue Adams, solía ser una chica solitaria, fanática por los libros y mi peludo amigo Snake. Llevaba una vida tranquila y silenciosa... Como a mi me gustaba, pasaba desapercibida y así sería por siempre pero entonces Erick, el chico más popul...