Piscis

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-... Pero eres un tiburón...- Pensé en voz alta, literalmente.

- Y usted es una híbrida, venga, ¡Acompañeme! Todos van a estar felices por verla - y diciéndome esto, me comenzó a empujar con la punta de su nariz para que lo siguiera.

- ¿Pero cómo es que todos me conocen? - Pregunté avanzando entusiasmada hacia donde sea que me llevaban.

- Es gracias al joven Tristán, él se ah encargado de hablarnos de usted, de lo que le gusta, de como ah ido creciendo y esas cosas... Incluso nos contó que usted nunca ah tenido novio - Dijo el tiburón. Okey, creo que todos sabían de mi existencia y yo era la única que no conocía realmente lo que era. Aunque más que enfadarme me enternecio el hecho de que Tristán hiciera todo eso por mí... Creo que podría entregarle mi vida sin dudar y él no me defraudaría...

Por todos los peces... Creo que me siento algo culpable por no haber escuchado a Tristán... Él sabía porque me decía las cosas.

- Hey tiburón... Tristán, él... ¿Todos saben que es mi prometido? Si les contó tanto sobre mí deberían saber eso también ¿No? - Le pregunté apoyando mi rostro confianzudamente en una de sus aletas mientras avanzábamos. De pronto un extraño cariño me había empezado a surgir por aquel feo y aterrador tiburón.

- Así es... Pero eso lo proclamó tu padre en cuanto supo que tendría una hija, Junio dijo que no habría tritón más noble que Tristán y estaba dispuesto a dejarte en sus manos sin importar qué - Así que todo esto había sido idea de mi padre desconocido... ¡Que extraño sistema tenían los tritones para comprometerse!