Secretos De Un Heterosexual [En revisión]

18- Interludio

-Jaden. ¿Qué haces aqui? -Preguntó Mateo al chico moreno

-Joder, tío, que guapo te has vuelto -dijo Jaden.

-¿Alguien me puede explicar qué esta pasando? -Pregunté.

-¿Te acuerdas de tu primera paja? -Me dijo Mateo.

-¿A qué viene esto?

-Escúchame con atención. Él es un amigo mío. Lo conocí los veranos en que mis padres me traían a veranear por aquí cerca. Él estuvo presente delante de mi primer beso, me enseñó lo que era una paja y a espiar a las chicas en la playa sin que se dieran cuenta. Pensarás que haber compartido momentos tan íntimos nos hace amigos inseparables, pero no es así. 

Mateo miró al chico que yo no conocía de nada, desafiándolo con los ojos.

-Él me acosaba, nos duchábamos juntos, me miraba y me acariciaba de tal manera que yo hasta tiempo después, no entendí que significaba todo eso. A veces hasta se quedaba a dormir en mi casa. Hasta que una vez me desperté en mitad de la noche sin calzoncillos y con él tocándose frente mi cuerpo desnudo. Por eso le pedí a mis padres que nos fuéramos y que no volviéramos nunca más por aquí. 

-Tío teníamos sólo 11 y 12 años, era pequeño. No sabía lo que hacía... -intervino Jaden-. Siempre me gustaste, pero tu sólo ibas detrás de chicas y tu nunca me ibas a mirar como ellas. Buscaba complacerme con lo que podía sin intentar hacerte daño. Durante estos años no he hecho más que arrepentirme. Quería pedirte perdón, pero por lo visto no soy eres el único que merece una disculpa. 

-¿A qué te refieres? -preguntó Mateo.

-Tío, me aseguraste que no eras gay y ahora me encuentro con ésto. No te hagas el tonto, os acabo de ver en el mar enamorándoos. ¿Como se supone que debo de sentirme? 

-Déjanos en paz -dijo Mateo empezando a andar dirección al apartamento, yo le seguí sin dilación. Cuando pasamos por el lado de Jaden para seguir rectos, éste volvió a abrir la boca

-Han pasado más de ocho años, ¿en serio sigues pensando que soy el mismo?

Mateo se paró en seco. Parecía enfurecido.

-¡Cómeme los huevos y déjame en paz, te lo pido por favor!

Jaden le bajó el bañador a Mateo de un tirón. Mateo se dió la vuelta y se los subió de golpe.

-¡¿Que coño haces?!¡¿A caso quieres que te pegu... -Mateo no acabó la frase. Supongamos que le hubiera pegado a Jaden. Él chico moreno parecía bastante más fuerte que él.

-Sólo iba a hacer lo que me has pedido.

-No te he pedido que me bajaras nada, lo que he dicho antes era una forma de hablar. Ahora por favor, desaparece de mi vida.

Nadie dijo nada. Ni de como se había sonrojado Mateo, ni de la sonrisa pícara de Jaden. 

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Muchas gracias a todos los que seguís leyendo y a los nuevos que se van uniendo a ésta aventura. Me hace muy feliz leer los comentarios y ver que os gusta, y agradezco a los que lo seguís haciendo puesto que me anima a seguir escribiendo y a sacar tiempo libre de donde puedo para publicar capítulos más a menudo.  Muchos besos y gracias de nuevo ♥