Capítulo 49.

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Chad no solía decir «te he echado de menos» o «te extrañaba mucho hermano» ya que con un abrazo fuerte de palmadas lo expresaba todo. Como se sentía y lo que trataba de decir. Pero esa vez no fue así. El y yo hablábamos la misma lengua. Entendía su dialecto, y esto fue una razón por la cual en nuestra amistad siempre nos entendíamos.

-Yo También te extrañaba amigo pero ahora lo único que debo pedirte son dos cosas: 1) Disculpas. Y 2) Un cargador para mi teléfono.

-Un segundo, ¿tu? ¿pidiendo disculpas? ¿Te afectó el viaje cierto? Pensaba que solo lo hiciste por mensaje porque te apenaba decirlo en persona, y estas muy cambiado y un centímetro mas alto que yo. Espera. Si, si lo eres, pediste un cargador y eso es muy típico de Mónica.

-Justo cuando ya empezaba a olvidar que tenía ese nombre.

-A ver, dame un abrazo. Y claro que te disculpo.-Dijo Chad riendo y abriendo sus brazos.

Chad coleccionaba cualquier tipo de cosas. Una vez fue a mi casa y recogió de la papelera bolígrafos que ya no servían. Y no era de extrañarse que tuviera un colchón desplegable para poder dormir.

James dormiría en el sofá de la sala, y mamá y papá en una habitación desocupada. En ese momento ya sabía a quien llamaba mamá en el auto, y era a la Sra. Stone para hablar sobre esto.

Todos estaban a punto de dormir. A excepción mía ya que solo pensaba en el día de mañana.

• • •

-Un minuto más Chad, espera.-Espera.-Esta bien, desperté.-Respondió Jade medio sonámbulo.

-¡Vaya! No sabía que dormías tanto.

-Lo experimenté en Aspen. El frío saliente de mi ventana es especial.-Aun tengo sueño, seguiré durmiendo.

-¿Todavía quieres seguir durmiendo? Jade, tengo meses sin verte y sin saber nada de ti. Tengo meses sin amigos. Meses aislado. Necesito de mi mejor amigo que solo quiere dormir.

-Lo siento, no había pensado en eso. Katherine fue a visitarme y me contó sobre ti, Augusto y los demás. Quedé boquiabierto con todo, no pensé que esto pasaría. Y necesito que ahora tu te desahoges y me digas lo que ha pasado estos últimos meses amigo.

-Está bien. Todo esto comenzó el veintiocho de diciembre, días luego de que discutieramos. Organicé una fiesta en casa con la finalidad de año nuevo. Ese día estaba sentado en el sofá de la sala por casi dos horas esperando a que alguno de mis amigos se dignara a aparecer, y pues recibí un mensaje de texto donde Augusto expresaba pena por decirles a las personas que fueran a su casa y no a la mía-No estaba tan molesto ya que podíamos celebrar en otra parte. Pero cuando llegué a su casa él mismo organizó una fiesta sin invitarme. Era increíble la clase de personas que habían; populares, casi a toda la escuela, chicos de clase alta y hasta mis amigos, incluyendo a Katherine, su novio, y sus amigas.-Luego de esa fiesta ninguno se digno a hablarme, incluyendo a Augusto que de un día a otro y sin explicación se alejó de mi. Parecía como si fuese invisible para todos. Roger fue el único amigo que no me falló, pues, siempre estaba apoyando y ayudando.-Y Katherine al igual que David, siempre estaban con sus parejas. Y aveces Olivia se acercaba para platicar conmigo. Pero ya no importa, iremos a la universidad y cada quien tomará caminos distintos.

-Siento que todo esto es mi culpa. Yo hice que se alejaran con todo eso de la pelea. Nuevamente te pido disculpas, quisiera que el tiempo fuera eterno. Quisiera que fuésemos los mejores amigos como antes. Quisiera que todo fuese como lo era antes. Pero no era feliz así que vivamos el ahora porque hay cosas que no tienen solución.-Dijo Jade

-Ya no te culpes, dejemos todo como está y cambiemos de tema, ya no quiero estar mal. Hablemos de ti.-Dijo Chad alzando las cejas.

-Pues, me encanta Aspen. Pensaba que todo iba a hacer difícil y que no me acostumbraría, pero todo resultó lo contrario. Conocí a personas especiales, una de ellas se convirtió como en mi mejor amigo y la otra...bueno la otra es mi novia.

-Espera ¿Tienes novia?.

Chad empezó a reírse y no sé si era de felicidad ya que no lograba divisar su rara expresión.

-¿Terminaste?

-Está bien, y ¿cómo se llama la afortunada?

-Su nombre es Hazel.-Respondió ruborizado Jade.

-Y ¿El de tu «mejor amigo»?

-Se llama William y no trates de ocultar tus celos que no te reemplazaré.-Rió Jade luego de lanzarle una almohada a Chad.

-¿Celoso? Pues claro que no.-Y se nos está olvidando que hoy es el baile de graduación.

-¡Es cierto! Lo olvidaba. Hoy es el día.

-Vayamos a desayunar.-Dijo Chad

Mamá había pasado todo el desayuno agradeciendo a los padres de Chad por brindarnos su hogar por tres días.

Iba en camino a la habitación de Chad para buscar algo en mi equipaje cuando la pequeña hermana de Chad salió de la nada.

-Hola Jade, mi nombre es Abigail, me puedes decir Abi, y eres muy guapo.

-Gracias pequeña.-Dijo Jade en lo que sonó más como una pregunta.

• • •

Chad se me había adelantado en llegar temprano al baile. Yo aun me encontraba en su casa sin siquiera ponerme el esmoquin. Pero reaccioné y me vestí lo más rápido que pude.

El viento resoplaba y las nubes oscurecían. Era algo muy típico que no llevase la suerte de mi lado. Muy típico el andar corriendo para no mojarme de agua. Y muy típico que cada vez que tomara la iniciativa de salir a alguna parte el clima se pusiera en mi contra.

Recién llegué a la escuela y había atraído la atención de todos y lo odiaba. Irónico ya que antes lo amaba. Traté de divisar entre las personas a Chad u alguno de mis antiguos amigos y a lo lejos pude ver a Oliva cerca de la mesa tomando un refresco.

-Hola Olivia, ¿aún me recuerdas?

-¡Jade! ¿Y cómo te voy a olvidar?-Respondió está con un abrazo.-¿Cómo has estado?

-Muy bien. ¿Y tu?

-Exelente, ¿cómo no estarlo?-Seguramente ya te han hecho un cuestionario sobre tus días en Aspen y supondré de que conocistes buenas personas y que la pasaste súper bien.

-Acertastes.-Rió Jade.-Me encanta como esta decorado todo esto, con ese verde esmeralda en los globos, cortinas, vasos y hasta manteles de mesas, y sobre todo esas orquídeas en los centros de mesas.

-Muchas gracias por apreciar todo esto. De verdad que pasamos por demasiados obstáculos y meses de organización y esfuerzo.-Respondió Oliva.

-No te preocupes. De casualidad ¿Viste a Chad?

-Si no me equivoco es aquel sentado, junto a Katherine y Roger.-Señaló Olivia el lugar.-Vayamos.

Atrévete a Cambiar.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora