Mi corazón comienza a latir con mucha más rapidez al ver los grandes charcos de sangre en el suelo y manchas de esta en la pared, se encuentra espesa, coagulada y juzgando por su aspecto, es reciente. No logro ver más allá de los rincones por lo que me coloco de puntas intentando encontrar rastros de Ethan pero me veo obligada alejarme de la puerta al esta ser sacudida con gran fuerza. ¿Qué pudo haber sido eso?
Acerco mi mano temblorosa hacia la manija de la puerta y la giro pero esta se encuentra cerrada con seguro, intento nuevamente agitando con fuerza pero no consigo resultados. Frida a mi lado sólo se encoge de hombros al ver mi frustración y se gira de nuevo hacia el pasillo, su rostro palidece y no dudo en girar también para ver qué cosa la puso así. Frente a nosotras se encuentra Blake Bahamonde con una gran sonrisa, macabra y cínica como él. En sus manos lleva una gran cantidad de llaves y juega con esta mientras da pasos lentos hacia nuestra dirección. Puedo jurar que mi corazón se desprenderá pronto.
Levanto mis manos hacia su dirección e intento mantenerlo lejos pero mi magia es inmune a él. Bufo molesta y retrocedo unos pasos junto a Frida, quien al moverse es sostenida por un hombre a sus espaldas. ¿De dónde ha salido este? No dudo en saltar hacia mi izquierda y observo a mis costados aquellos hombres que ahora me observan detalladamente. Blake dejó de jugar con sus llaves y cruza sus brazos sobre su pecho, viéndose aún más relajado que antes.
-Te estaba esperando, Sarah-su voz hace eco en el lugar, es gruesa y segura-. Te ves bien-dice mientras me observa. Sus ojos son de un color realmente extraño, irreal. Es una combinación de rojo con amarillo escandaloso, cualquiera que los observara de manera fija juraría que son postizos.
-Quiero ver a Ethan-digo con dureza, tanto que me llego a sorprender por la valentía que de repente consume mis temores.
-Ten precaución con lo que deseas-dice con una sonrisa amplia en sus labios-. Nunca sabes lo que se oculta detrás de esas paredes hasta que lo decides averiguar. Lamentable, tu amigo no escuchó consejos de niño-chasquea sus dedos y se hace un lado para dejarme ver sobre sus hombros.
Otro hombre de gran altura trae a Tyler en sus brazos, sosteniendo su cuerpo con fuerza y mientras este se sacude, presiona aún más su agarre. Tyler luego de unos segundos deja de luchar y se deja cargar resignado.
-No los lastimes-digo intentando mantener cordura en mis palabras.
-Oh no, tranquila, no tengo en mente hacerlo-ladea su cabeza-. Al menos, no yo.-termina por decir.
Blake camina a en medio de nosotros e introduce una llave en la gran puerta, esta emite un fastidioso sonido al abrirse y me hace una seña para que entrara.
-Tus respuestas están aquí-dice cuando paso por su lado y antes de que me girara hacia él, Frida y Tyler son empujados hacia dentro en mis espaldas por lo que me bloquea el paso de salida. La puerta es cerrada de nuevo y puedo escuchar la risa de Blake detrás de ella. Golpeo varias veces la ventanilla pero no consigo respuestas.
-Necesitamos salir, ¡busquen algo!-grito alterada mientras sigo agitando la cerradura.
-Sarah guarda silencio-susurra Frida y gruño molesta antes de girar hacia su dirección.
- ¡¿Quieres qué guarde si..?!-dejo la palabra por la mitad al ver un animal durmiendo plácidamente en una de las esquinas. Su cuerpo sube y baja lentamente por lo que da a entender que no está muerto.
Sus grandes colmillos me causan más escalofríos que el gran tamaño de su cuerpo. El lobo no parece molestarle todo el ruido que estuvimos causando hasta que observo como poco a poco va abriendo sus párpados. Sus patas lo ayudan a levantarse y se estira al ya estar de pie, sus ojos no dudan en posarse sobre nosotros. Frida parece estar a punto de desmayarse, su labio tiembla y puedo asegurar que mi rostro luce igual de aterrado al suyo. Tyler luce confundido e impactado, no pestañea hasta que escucha un gruñido de parte del lobo.
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Avenencia. [#1 LIBRO]
FantasyLa adrenalina corre por sus venas, y el peligro saborea sus labios. Sarah Parks, una chica común y corriente, o al menos eso parecía antes de ser visitada por una pequeña e inocente niña en busca de ayuda para escapar de ciertos sujetos que la persi...