- ¿Por qué estás aquí?-pregunto en dirección a Blake y retrocedo en cuanto lo veo levantarse. Recuerdo perfectamente que hace un tiempo atrás los descubrí como socios.
-Me tendieron una trampa-sonríe falsamente-. ¿No es divertido?, volverse a juntar-se acerca hacia mí pero Elias lo detiene en cuanto da unos pasos. Blake lo observa con desprecio.
- ¿Cuánto llevas aquí?-pregunto volviendo a captar su atención.
-Desde que comenzaron a coleccionar mutantes-dice y aunque parecíamos tener una conversación tranquila, él y Elias no dejaban de dedicarse miradas profundas. Sus puños están presionados y aunque quería ignorarlo, dejaban mostrar sus colmillos de vez en cuando.
Para mí y para nuestra buena suerte, abren la puerta justo en ese momento y Bastian se deja ver. Camina con cierta lentitud hacia nosotros y se detiene. A su espalda hay dos guardianes más que desconozco. En sus manos lleva la misma espada que traía conmigo.
-Antes de que quieran comenzar con sus inútiles preguntas, quiero dejarles algo claro-dice virando los ojos y jugando con la espada en sus manos-. Tengo la obligación de matarlos a todos ustedes, ya que han desobedecido las reglas-
-Lo que dices son mentiras-susurra Elias y Bastian voltea a mirarlo.
-Eso no lo sabrán los dioses-responde y sonríe cínico-. En fin, hay dos opciones que están en tus manos querida Sarah-frunzo el ceño.
- ¿Cuáles?-pregunto sin temor.
-Tu vida se perdonará si tomas la vida de otro-dice y lo miro con cierta confusión y repugnancia, ¿ha delirado?-. Y esa persona será Elias-
Los ojos de Elias se vuelven una fina línea al mirarlo con sospecha, se ha mantenido muy silencioso y eso me inquieta. Nunca se sabe qué habita en su mente todo el día, ni en qué piensa, cosa que es de mucha necesidad para mí saber.
-O, tal vez, consideres un debate de guardián a guardián-la voz de Bastian vuelve a captar mi atención-. Si ganas, todos quedarán libres. Si pierden, todos mueren-se encoje de hombros.
- ¿Contra quién?-entrecierro mis ojos y lo veo hacer un gesto de manos que entendí como una disimulada seña hacia él mismo. Otra vez, sin que dijese algo, me lanza la espada y con agilidad la agarro desde su empuñadura.
Elias niega levemente, queriendo hacerme ignorar aquella propuesta pero entonces, ¿y si es este el momento en que se cumplirán las visiones?
-Acepto-digo poco segura de mi respuesta. Bastian plasma una sonrisa en sus labios y asiente.
-Buena elección, serán guiados al lugar de concentración en cuanto dé la orden-y dicho esto, se voltea para irse.
La puerta es cerrada y puedo sentir todas las miradas que hay en lugar posadas en mí. Elias parece querer gritarme y es ahí cuando me sentí realmente insegura sobre mi decisión.
Cuando los guardianes vienen por nosotros hacen todo lo que Bastian ha dicho anteriormente, estos nos llevan a regañadientes hacia el sitio en el bosque, justo en el cerro donde antes se han hecho las reuniones. Allí nos espera Bastian y entre otros sujetos que nunca he visto, están Ronan, Dorcas y Amanda. No puedo descifrar sus miradas pero lucen desconcertados. Sigo inspeccionando cada rostro mientras camino hacia ese sitio.
Mi respiración es agitada y puedo jurar que siento cómo mi mano comienza a temblar. Y todo eso empeora en el momento que puedo reconocer a Andrew situado al lado de Bastian con expresión de dolor. Parece querer ignorar un sentimiento y supongo que es por como me encuentro. No me he recordado de él en el momento que acepté la propuesta.
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Avenencia. [#1 LIBRO]
FantasíaLa adrenalina corre por sus venas, y el peligro saborea sus labios. Sarah Parks, una chica común y corriente, o al menos eso parecía antes de ser visitada por una pequeña e inocente niña en busca de ayuda para escapar de ciertos sujetos que la persi...