— Estás castigada. No propinas, no salidas y tienes terminante prohibido utilizar ese móvil. ¿Entendiste?
Miro a papá mientras, con el ceño fruncido, me pregunto en qué parte de la historia de mi vida papá se ha perdido. Claramente él no entiende que:
¡Ya no tengo diez años!
— No puedes pretender castigarme de esa forma. Ya no soy una niña. ¡Ya no más!
Emito un bufido y trato de entrar a mi habitación, sin embargo los gritos de papá me alarman.
— ¡¿A qué te refieres con que ya no eres una niña?! —. Blanqueo los ojos y me cruzo de brazos totalmente fastidiada por su interpretación—. ¿Acaso tú y el del mensajito? — abre los ojos ante la sorpresa de lo que su loca mente esta imaginando—. ¡Uy sí lo mato! ¡Dime su nombre!
— Interpretaste mal, yo me refería a que...
— Mirian Fernanda, no trates de engañarme. ¡Dime el nombre de ese degenerado! Tú todavía eres una bebé. Hace unos pocos años te enseñé a andar en patineta. Además, aún eres menor de edad, ese tipo ha de ser un delincuente.
—Tengo veinte años — achico los ojos.
— ¿Qué? Pero si hasta hace poco fueron tus quince. Mirian, no lo defiendas. Por el mensaje pude deducir que es un acosador, mira que ofrecerte una noche de... de... eso ¡Mugroso! Dime su nombre, tengo amigos policías y ellos podrían ayudarme en esto.
Froto mi rostro de forma exasperada. Mi padre es un tipo difícil de convencer cuando se le mete algo en la cabeza. Tomo aire por la boca antes de responder y luego lo suelto lentamente, tratando de tranquilizarme y de reunir un poco de paciencia.
— Papá, su nombre es Marlon —levanto una mano antes de que él diga una palabra—. Y deberás saber que él...
No estoy muy segura de lo que diré, pero aun así continúo.
—Es gay.
Aprieto mis labios y examino la reacción de papá. El rostro dubitativo de mi padre, me obliga a agregar algo más. —El mensaje es una tonta broma entre él y yo. Marlon es gay desde hace mucho tiempo, incluso... tiene un novio y se llevan muy bien. Son chicos agradables.
— Pues ese mensaje no parecía de un tipo gay —levanta una ceja.
— Es que aún no declara su orientación frente a todo el mundo —si fuera pinocho mi nariz estaría en Singapur —. Y ya sabes... —agito una mano para darle un toque casual a mi frase —. Tiene miedo de ser descubierto, solo me lo ha confesado a mí porque somos muy amigos.
—No lo sé, Michi —toca su mentón y me observa ceñudo.
— Créeme papá, Marlon jamás se fijaría en mí —bueno, al menos en esa parte no estoy mintiendo—. Ni aunque le gustaran las chicas, sería una opción para él.
No puedo evitar que mis propias palabras toquen un punto sensible en mí. Papá nota mi abatimiento, así que se acerca a mí y me da una palmadita en el hombro. Su acción lejos de confortarme, me hace sentir un poco miserable.
— ¿Qué dices, bichito? Cualquier muchacho debería sentirse afortunado de tenerte a su lado.
Una sonrisa de agradecimiento se forma en mis labios. Papá trata de ser amable conmigo, pero ya saben lo que dicen: Los padres están obligados a ver a los hijos como Dioses del Olimpo. Lo dice la ciencia. Lo dice Cecilia.
—En cuanto a ese Marlon, no creas que ahí acabó todo — la jaqueca vuelve al darme cuenta de que mi mentira no ha funcionado del todo—. Sé que ocultas algo respecto a ese chico y desde ya ¡No me gusta para ti!
![](https://img.wattpad.com/cover/73965813-288-k64833.jpg)
ESTÁS LEYENDO
WHEN SHE WAS HIS FRIEND.
Teen Fiction*Lista corta de los Wattys 2018 Él está confundido. Él es un poco idiota. Él está ciego. Él no olvida. Él está desilusionado. Él está enamorado. Él... Él es real. ¿Y yo? Yo siempre seré su amiga.