Mamá y Jessica no han dejado de intercambiar miradas en toda la velada.
Desde el saludo hasta el momento en el que la novia de mi padre se dispuso a "deleitarnos el paladar", ellas no han parado de lanzarse miradas recelosas. Admiro la resistencia de mi madre, sé que esta no es la idea que ella tuvo de la velada. Sé que en el fondo de su corazón mamá ha esperado que mi padre le dé una noticia esperanzadora. Pero la verdad, es que la noche está muy lejos de ser lo que ella ha deseado. Mi padre dista mucho de ser el tipo con cojones que todos queremos y parece estar dominado por Jessica. Tanto así, que nuestras posiciones alrededor de la mesa han sido decididas estratégicamente por ella. Entonces, el escenario es el siguiente: Papá está en la cabecera y a la derecha se encuentra Jessica; nosotras, como buenas invitadas que somos, estamos al otro extremo de la mesa. Tristemente, y como en la mayor parte de mi vida, estoy frente a la parejita de novios, quienes por cierto se han dado aproximadamente tres besos desde que empezamos a cenar.
Así como lo leen.
Mi ex amigo tiene un buen estómago.
Incluso más resistente que el de mi padre frente a la comida de Jess.
El sonido de los cubiertos sobre los platillos y uno que otro comentario alusivo a la comida, es la única música que nos acompaña esta noche. De no ser por el chillido de estos y la voz de mi padre intentando hacer una conversación amena, el ambiente estaría tan callado como un cementerio.
Ceci, me patea bajo la mesa cuando capta el pequeño roce de narices entre Marlon y Norma. Al mirarla, me indica que revise mi móvil. Cuando saco este de mi bolso y reviso la pantalla, encuentro su mensaje de WhatsApp.
- " ¡¿Qué esperas para arrojar el ajo sobre la Frankenzorra?! "
Bloqueo la pantalla cuando termino de leer el mensaje, observo a Ceci y ella levanta el mentón hacia los noviecitos. Achico los ojos y niego la cabeza, desaprobando su tonto mensaje.
¡Ja! como si fuera tan fácil conseguir ajo justo ahora.
En segundos, se oye el timbre de la puerta principal. Todos giramos en dirección a esta, curiosos de saber quién es el siguiente invitado. Jessica parece conmocionarse un poco, frunce el ceño, se limpia los labios con una de sus servilletas perfumadas y dice:
— ¿Acaso tienes un hijo más, mi amor? —seguido de esto suelta una risita en la que yo capto cierta hipocresía.
— Huelo a sarcasmo obvio y barato —comenta Ceci. Mamá la regaña bajito mientras pellizca su antebrazo. Mi hermana hace un mohín y luego aclara la garganta. Una sonrisa maliciosa está dibujada en su rostro.
—Yo abro, querida —pronuncia ella mientras arrima su silla para levantarse y dirigirse hacia la puerta.
En nuestros lugares todos nos miramos las caras, completamente confundidos por la actitud de Ceci.
— Ah, esta muchachita malcriada. Creo que se ha tomado el atrevimiento de invitar a una de sus amiguitas —dice papá.
— Pues te equivocas —habla Ceci desde la puerta.
Acto seguido, vemos pasar a un personaje que jamás creeríamos que estuviera aquí esta noche. Mi pequeña hermana ha tenido la genial idea de invitar a nada más y nada menos que a su " adorable" noviecito. Sí, Bryce el violador ha regresado a la cancha nuevamente.
Me acomodo en mi asiento y mastico un poco de carne dura antes de ver el rostro enfurecido de papá. No pasan muchos segundos para que él se pare de su silla y levante la voz como el ogro que es.
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WHEN SHE WAS HIS FRIEND.
Teen Fiction*Lista corta de los Wattys 2018 Él está confundido. Él es un poco idiota. Él está ciego. Él no olvida. Él está desilusionado. Él está enamorado. Él... Él es real. ¿Y yo? Yo siempre seré su amiga.