La Chica de la Biblioteca

Día con... Matt

- Emma -me dice alguien tratando de despertarme.

Me despierto lentamente sin abrir los ojos y abrazo a la persona que intenta despertarme. Pero bueno, es que según mis amigos toda la gente reacciona mal cuando la despiertas, pues yo soy TODO lo contrario, quizás me despierten y abrace a la persona que lo hizo, o abrazo algo que tenga cerca, no lo sé. El punto es que si me despiertan tranquilamente soy la persona más cariñosa, tierna y dulce del mundo mundial.

- Emma -vuelve a decirme la persona que estoy abrazando.

- ¿Mmmmm? ¿Qué? -pregunto dormida.

- Ya es media noche te quedaste dormida, y además no se que pensábamos pero no hay escuela mañana. Hoy es viernes -dijo Matt riendo.

- Ah, okey -digo aún dormida. Intentando dormir aún más.

- Vamos, vé a tu habitación -me pide.

- ¡Noo! Tengo sueño y estoy cansada. Llévame -le pido.

- No, vamos tienes que ir tu misma, porque si yo te llevo quizás mañana me reclames -dice.

- Por favor -digo y me vuelvo a quedar dormida. Antes de eso escucho que él dice:

- Está bien, espero que mañana no te molestes -Y sin más que decir creo que me llevó a mi habitación.

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Estoy soñando tranquilamente con arco iris y unicornios hasta que algún idiota y cuando digo idiota me refiero a Matt, me tira un balde lleno de agua fría.

- ¡IDIOTA! -le grito en cuanto termino de ahogarme con el agua que caía rápidamente en mi cabeza.

- ¿Qué? -preguntó el idibécil haciéndose el santo- No te despertabas y necesitaba que lo hicieras así que decidí mojarte un poco.

- ¿UN POCO? -grito furiosa y él asiente- ¿UN POCO? TODA MI CAMA Y TODA YO ESTOY MOJADA, ¡IDIOTA! -grito.

Matt comienza a reír como el retrasado que es.

- ¿QUÉ ES LO QUÉ TE PARECE GRACIOSO? -pregunto enojada y gritando un poco. Un poco mucho...

- Es que te ves más linda de lo que eres cuando estás enojada -respondió sonriendo. Yo lo fulminé con la mirada.

- No te enojes Emma, mira, vamos a hacer algo... Para compensarte por lo que hice... Hoy pasarás un día completo conmigo -dice con algo de superioridad.

- ¿Y qué te hace pensar qué quiero pasar el día completo con un idibécil como tú? -pregunto ya más calmada.

- Todas quieren eso -responde Matt.

- Ya te lo dije. No soy como "todas" -ruedo los ojos.

- Tienes razón, lo siento. Pero igual pasarás el día conmigo -me guiña un ojo y se va, sin dejar que yo le responda.

Ruedo los ojos nuevamente, voy a bañarme ya que estoy mojada, me cambio y preparo para ir quien sabe donde con Matt.

Bajo hacia abajo.

Y si, idiota. ¡Acaso se baja hacia arriba? Me pregunta mi mente.

Termino con la discusión mental. Como les decía, bajo hacia la cocina.

- Tengo hambre -digo entrando al lugar.

-Okey, tranquila Emma. Comeremos cuando lleguemos a donde vamos-dice Matt acercándose.

- Bien, entonces vamos -lo agarro de la mano y subimos al auto. Quiero irme ya, no se si para ver lo que preparó Matt o por el hambre.

Subimos al auto, hicimos nuestro viaje en silencio una vez que Matt se negó completamente a decirme a donde íbamos. Así que decidí callarme.