Después de un mes de duro entrenamiento. Esta noche sería el momento más importante para comenzar mi carrera como modelo. Muchos diseñadores, agencias, revistas y televisiones estarían aquí. Estaba muy nerviosa, pero debía ser fuerte y solo hacer tan y como me habían enseñado. Invité a Liz, a Alex e a Ian, en primera fila, para el espectáculo. Nunca les podría dejar atrás, no después de que me hayan apoyado tantísimo. Estábamos en la parte de atrás del escenario preparándonos y yo estaba temblando de nervios.
-Relájate, lo harás muy bien.
-Es que hay tantas personas...tengo miedo de hacerlo mal.
-Sabemos que el primero siempre es más difícil, pero todas te hemos visto y lo haces muy bien. Solo sonreí, mira al frente y solo piensa que te están viendo tus amigos, nadie más.
-Sonreír y mirar adelante...no parece un mal plan.
-Cinco minutos, chicas. Estas preparadas. -Me dieron los últimos retoques con el maquillaje, y todos se empezaron a mover. Espero que los nervios no me hagan fallar ahora, esto era muy importante.
Narra William:
-¿Acaso es qué no has aprendido la lección?
-Tengo que verla, y esta es la única noche en la que puedo acercarme. -Me puse bien la corbata y me abroché la chaqueta del traje. -Venga Ryan, ayúdame.
-¿Qué te hace pensar que ya no está enfadada?
-Solo necesitaba tiempo para calmar un poco las cosas, seguro que ahora me dejaré explicarme.
-Sabes lo que pasará sin Marcus se entera.
-Nunca dejaré que pase eso. Estará bien, y Marcus no tiene porque enterarse de que existe. Solo quiero recuperarla.
-Debes de estar muy enamorado de ella, para molestarte tanto por una mujer.
-Lo estoy, y yo siempre consigo lo que quiero. Ella volverá conmigo. Vamos, no quiero llegar tarde.
Fuimos en su coche hasta el teatro principal, donde se haría el desfile. Le pedí ayuda a Ryan, porque con su apellido, podría pasar muy fácilmente, y además podría ir a verla sin problemas. Paró delante de la puerta principal y enseguida un aparcacoches, cogió las llaves y se llevó el coche. Entramos, y cuando llegamos a recepción, donde había que entrar con invitación o con una pase de prensa, pero solo hizo falta decir Ryan Bayron, para que nos dejaran pasar enseguida. Dentro estaba repleto de gente, nos movimos hacia uno de los laterales y nos apoyamos en una de las paredes.
-Cuéntame otra vez tu gran plan de reconquista.
-Cuando esto acabe, iremos a la parte de atrás, le dirás a quién sea que dirija esto que te gustaría ver a la nueva modelo. Vamos los dos y después yo me encargo del resto, mientras tú te vas a hablar con alguna amiga.
-¿Y si te larga a patadas o llama a seguridad?
-No lo hará, confío bastante en mí mismo, y si pude convencerla de salir conmigo una vez, puedo hacerlo de nuevo. Le explicaré lo que quiera saber y ya.
-¿Vas a contarle todo?
-Bueno...hay cosas que es mejor guardarse para uno mismo. Le diré de ir a dar una vuelta por el parque o así y hablaremos tranquilamente.
-Es tan ridículamente directo, que incluso creo que funcionará. ¿Y si ya tiene un nuevo novio?
-Me deshice de uno, puedo con otro perfectamente. -Sonreí por lo bajo y metí las manos en los bolsillos, cuando vi que empezaron a apagar las luces. -Modelo... No me puedo creer que de verdad vaya a ver un desfile de moda, en el que va a estar ella.
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Chicos Malos
Romance¿Qué pasaría si el chico más molesto, creído y el mayor acosador de la historia, te acabara enamorando? Alena solo quería una vida universitaria tranquila y relajada con sus amigos, pero con él todo serán problemas y peligros.