Me fui con Sophie muy lejos de la residencia, y nos detuvimos en un pequeño parque que había cerca de allí. Yo todavía no podía asimilar lo que acaba de ver, era surrealista.
-Vale, lo que te voy a contar es muy delicado.
-Ha disparado a Ian, ¿por qué lo ha hecho?
-Lo siento, a veces no tiene autocontrol. Se ha enfadado demasiado, y eso ha provocado esto.
-¿Quién es William? Creía conocerle, pero todo lo que sé, ¿es mentira?
-William quería alejarte de su mundo, y también del nuestro, porque te quiere. No quería que acabaras como yo, y que Marcus te descubriera. No somos buenas personas, trabajamos en asuntos fuera de la ley, por eso...tenemos todo lo que queremos.
-Es imposible, no...no puede ser...-Me alejé de ella y empecé a mover mis manos nerviosa. -¿Por qué nadie me ha advertido de él? ¿Podría haber estado en peligro?
-Todos prometimos no decirte nada, por tu seguridad. Lo de antes fue un error...Estoy segura de que ahora mismo debe de estar incluso más nervioso que tú, solo quería protegerte.
-¡Les ha amenazado!¡De muerte! Puede que se hayan equivocado, pero les conozco desde hace años, son mis amigos. Yo...yo... esto es una locura...
-Alena, por favor cálmate, nunca haríamos algo que te pusiera en peligro, ni a ti ni a los que están a tu alrededor. Solo fue un error, no quería asustarte. -Intentó acercarse a mí, pero yo retrocedí más hacia atrás.
-¡No! ¡No os acerquéis a mí! ¡Ni William, ni ninguno de vosotros! ¡Estáis locos!
Salí corriendo lo más rápido que pude, mientras limpiaba las lágrimas que salían de mis ojos. Volví a la residencia, a mi habitación y me encerré en el baño. Solo quería llorar, había sido una estúpida, y por mi culpa Ian estaba en el hospital. Le podía haber matado, es un asesino.
Narra William:
No nos movimos de allí desde que se fueron, y cuando vi a Sophie enseguida fui hacia ella, pero me preocupé al ver que Alena no estaba.
-¿Qué ha pasado?¿Dónde está?
-Ella se ha ido... -Bajó la cabeza y miró al suelo. -No quiere que nos acerquemos a ella, y tú tampoco.
-¿Qué?¿A dónde se fue? Tengo que hablar con ella.-Cuando me moví, Sophie me agarró del brazo y me paró.
-Solo empeoraras las cosas, ahora lo único que necesita es estar sola. Si vas a ahora, solo la asustarás más. Todos necesitamos calmarnos un momento.
-Will, ella tiene razón, ahora no es el momento.
-¿Qué?¿Y qué se supone que deba hacer ahora?¿Quedarme quieto?-Me alteré mucho y apreté los puños.
-Primero tienes que calmarte. Ya hemos pasado por esto una vez, no pasará una vez más.-Max y Sophie bajaron la cabeza casi a la vez. -¡Me niego a tener que repetir la misma escena que ha pasado hace tres años! ¡No veré morir a un amigo, otra vez! Así que cálmate y no salgas de tu casa, es una orden directa.
-Tsk...¡Joder!-Tiré mis cosas con rabia y me fui de allí. Sabía que tenía razón, pero aún así... sé como acabará esto.
Narra Alena:
Escuché a alguien entrar, debía ser Liz. Salí del baño y fui a junto de ella, no le di tiempo a decir nada y la abracé con fuerza.
-Eh, Alena...¿Qué te pasa?¿Estás bien?
-Ian está en el hospital, por mi culpa.
-¿Qué?¿Qué ha pasado?
-Yo...-No quería decir nada, no podía. -Vamos al hospital, ven conmigo.
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Chicos Malos
Romance¿Qué pasaría si el chico más molesto, creído y el mayor acosador de la historia, te acabara enamorando? Alena solo quería una vida universitaria tranquila y relajada con sus amigos, pero con él todo serán problemas y peligros.