Chicos Malos

Nuevo Novio

Narra William:

Por la mañana me desperté temprano; como todos los días, me levanté sin hacer ruido para no despertarla, y fui a darme una ducha. Eran las diez y algo, cuando salí del baño ya arreglado y vestido. Ella seguía durmiendo profundamente y parecía una niña pequeña, me daba pena despertarla, así que salí de la habitación y fui a hacer el desayuno. Unas tostadas, zumo, y café, lo puse todo en una bandeja y me lo llevé a la habitación. Lo dejé un momento en la mesilla y me senté a su lado.

Narra Alena:

Sentí un cosquilleo, y cuando abrí los ojos vi que era él, que me estaba dando un beso en la mejilla.

-Buenos días, preciosa.

-Buenos días...-Cogí la sábana y me senté en la cama.

-Ten, ponte esto.

Me dio su camisa y mi ropa interior y me vestí deprisa, hacia un poco de frío y así me abrigaba un poco. Olía algo delicioso, y cuando miré a la mesilla, la boca se me hizo agua.

-¿Lo has hecho tú?

-Me imaginé que tendrías hambre después de lo de anoche, así que...-Cogió la bandeja y la dejó sobre la cama.-Para ti y para mí.

-Todo parece muy rico.-Cogí una tostada y le di un mordisco. -¿También eres cocinero?

-Bueno...no soy un chef, pero puedo hacer algo.

-Eres tan bueno, y yo me he portado muy mal contigo.

-Eso tendría que decirlo yo, fui un estúpido al tratarte así antes. Tú me has cambiado completamente, y ahora no puedo dejar de pensar en ti.

-Eso es muy bonito.

-Quiero estar contigo, ¿quieres salir conmigo? -¡Me estaba pidiendo ser su novia! ¿Qué hago?

-Yo, bueno...

-No tienes que contestarme ahora, solo quiero que lo pienses.

La verdad es que... Ya no sentía por Dani lo mismo que antes. Después de aquel día, todo empezó a cambiar, y ahora William, me gusta mucho. Puede que sea un creído, y que fuera el mayor acosador de mi vida...pero en cierta parte eso me hizo interesarme en él. No solo ahora, sino antes. Quiero darle un oportunidad y conocerle más, me gusta Will, y quiero estar con él.

-Sí, si que quiero.

-¿En serio?

-Lo digo de verdad, me gustas mucho Will, anoche te lo dije, ¿no? Me gustaría salir contigo. -Nos besamos apasionadamente, y de repente llamaron a su móvil. Cogió su móvil, y cuando miró la pantalla, su cara cambió a una completamente seria. -¿Pasó algo?

-No es nada, sigue desayunando, ahora vuelvo.-Me besó la mejilla y se levantó, salió de la habitación y yo cogí el vaso con el zumo.

Fuera de la habitación...

-Ryan, ¿qué pasa? Tsk...¿tiene que ser justamente hoy? No, pero ya estoy comprometido con algo. ¿De qué se trata el trabajo? Cargamento...sí, claro. Nos vemos a las once esta noche. Adiós. -Colgó y volvió a la habitación.

-¿Ocurrió algo? Saliste de la habitación muy serio.

-No, nada... Ryan me pidió que lo acompañara a buscar a su hermano al aeropuerto. ¿Seguimos desayunando?-Se volvió a sentar a mi lado y cogió su taza de café.

Después de acabar de desayunar, estuvimos hablando durante un buen rato, cuando llamaron a la puerta.

-Se me había olvidado, he llamado alguien.-Se levantó de la cama y fui a abrir.