Chicos Malos

El Nuevo Rebelde

El 17 de Abril nació Liam, el hermanito de Emily. Tenía el pelo castaño como el mío y los mismo ojos grises que William. No podía estar más feliz de que mi niño ya esté con nosotros. Tan pequeñito y adorable como su hermana, pero cuando pensaba que era más tranquilo, me equivoqué por completo. Era incluso más rebelde que su hermana. Aunque al menos el hijo de Sophie, Dylan, lograba mantenerlo calmado cuando jugaban juntos. Era un mes mayor que Liam, pero cuando mi hijo se enfadaba asustaba al pobre Dylan.

Emily y él peleaban constantemente, cosas de hermanos, y William me ayudaba a controlarlos con sus berrinches. No sé como pudo salir tan hiperactivo, que yo sepa....no tomaba mucho azúcar ni café durante el embarazo, y Emily tampoco era así, pero por lo que me dijo la madre de Will, es que Liam era igual que su padre cuando era pequeño. Que no se estaba quieto en ningún lado. De tal palo tal astilla, ¿no?

Doce años después:

-¡Mamá, Liam me ha cogido el móvil! -Bajaron los dos corriendo por las escaleras.

-Porque te pasas todo el día hablando con Tyler.

Emily tenía 16 años, su cabello era largo y siempre lo mantenía suelto por un lado y trenzado por el otro. Era una chica muy guapa y estaba rodeada de amigos, y de chicos en su Instituto. Inteligente, divertida, muy impaciente y confiada.

Liam tenía 12 años, cabello corto y siempre sin peinar. Según muchas chicas, era el chico más guapo del Instituto, por sus ojos y su increíble personalidad. Era muy rebelde, deportista, le encanta meterse en problemas y molestar a su hermana mayor.

-Ya está bien vosotros dos. Liam, devuélvele el móvil.

-TSK...-Se lo dio y de repente la puerta que daba al jardín, se abrió, Cuando levanté la cabeza vi que Will había vuelto.

-Tienes mala cara, ¿pasó algo?

-Mi trabajo no para, me han vuelto a dejar solo para encargarme de unas cosas. A veces echo de menos mi pasado.

-No digas esas cosas.

-Oye papá, ¿puedo ir a una fiesta mañana por la noche?

-¿Qué?

-Bueno...unas amigas de mi clase, van a hacer una fiesta en casa de Alice, y yo también quiero ir.

-De eso nada, tienes 16 años.

-Pero mamá...todas van a ir. Además solo vamos a ser chicas, por favor...

-Si Emily va a salir, yo también quiero.

-Tú estás castigado. Me ha llamado la directora esta tarde y me ha dicho que te has vuelto a meter en problemas con otros chicos.

-Me estaban molestando, no es mi culpa.

-Venga papá, porfa, porfa...déjame ir.

-Todavía eres una niña pequeña, y no me fío de que solo vayan chicas.

-¡No es justo! No quiero ser la única que no vaya a la fiesta.

-Seguro que solo quieres ir para estar con Tyler...-Dijo Liam con un tono burlón.

-¡Déjame mocoso! Que tú estás castigado.

-Si siempre estás enfadada, ningún chico te va a querer. Pecho plano.

-Atrévete a decirlo de nuevo y te mato, mocoso.

-¿Podéis dejar de discutir un día por lo menos? Tú no vas a ir a ninguna fiesta y tú deberías estar en tu habitación durmiendo.-Me levanté al borde de la histeria y los mandé a los dos para arriba. Los dos subieron rechistando y yo me tiré de nuevo en el sofá.