Capítulo 45

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Lauren oficialmente había clasificado a los Juegos Olímpicos.

Su participación en los Trials había sido solo un adelanto de todo el trabajo duro que Lauren había estado haciendo durante los últimos cuatro años, en los que se había enfocado en mejorar sus tiempos y su técnica para demostrarles a todos porque era la considerada la mejor nadadora de todos los tiempos.

Y gran parte de eso debía agradecérselo a Camila.

El día de su cumpleaños, de camino al aeropuerto, Camila le había explicado que Nick llevaba días tratando de hablar con ella y como Lauren ignoraba sus llamadas, decidió recurrir a Camila a ver si esta la hacía entrar en razón. Pero Camila tampoco había tenido resultado.

Nick entonces le explicó a Camila el porqué de su insistencia: por errores de él y del manager de Lauren, no habían retirado su inscripción a los Trials y si Lauren no se presentaba, iba a quedar completamente descalificada. Además de que ya no podían utilizar una cláusula que resguardaba a los atletas alegando que para el momento de cierta competencia no estaban aptos para asistir, pero que presentarían pruebas médicas que lo pusieran en condiciones de acudir a los otros eventos, en este caso, los Juegos Olímpicos.

Los patrocinadores de Lauren tenían todo su equipo listo para ella, y las personas aún no habían notado su ausencia porque sus pruebas no empezaban hasta el tercer día de competencia. Y era normal que muchos atletas no llegaran los primeros días o prefirieran mantenerse alejados del foco cuando no competían.

Camila se había enterado el domingo por la noche y había mandado a Lilly a que le consiguiera un vuelo privado hasta Omaha que saliera la noche del lunes y le reservara un hotel a Lauren para los días que quedaban de competencia. La fotógrafa había hablado con las chicas para contarles la noticia y les había pedido que la ayudaran a sacar a Lauren del apartamento para que ella pudiese prepararle una pequeña maleta con todo lo que podría llegar a necesitar, y es por ello que había llegado tarde a la cena.

A Camila le hubiese encantado acompañarla, pero había sido algo de imprevisto y tenía un montón de cosas pendientes que no podía cancelar. Entre ellas, varias apariciones en fiestas de revistas, marcas importantes e inauguraciones de tiendas y restaurantes.

Se habían despedido en el aeropuerto con un beso largo y una Lauren que no cabía de la felicidad que sentía. Mientras Lauren caminaba hacia el avión, se volteaba a cada segundo a darle las gracias a Camila, quien todo lo que podía hacer era sonreír.

Ella haría lo que fuese por mantener a Lauren así de feliz.

Los días de los Trials fueron una locura, y Lauren solo hablaba con Camila en las noches para contarle como había ido todo. Su sonrisa, y la emoción que había en su voz cada vez que le hablaba a Camila sobre la natación eran suficientes para que ella también se contagiara, y acabara sonriente y feliz.

Camila había ido a buscar a Lauren al aeropuerto usando la chaqueta que ella le había regalado y se habían fundido en un abrazo emotivo apenas se encontraron. Fue la primera vez que la prensa las captó juntas, y en la que aprovecharon de atacarlas con cientos de preguntas mientras salían del aeropuerto hasta el auto de Dinah.

Más tarde ese mismo día, un comunicado de prensa había sido enviado y Lauren había recibido una carta en la que se anunciaba que ella había sido escogida como la encargada de llevar la bandera de Estados Unidos durante la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos.

Lauren lloró, gritó, saltó y corrió por todo el apartamento mientras procesaba la noticia y todo lo que eso significaba. Era real. Ella iba a ir a los Juegos Olímpicos después de un par de semanas llenas de incertidumbre y de no saber si el accidente iba a impedírselo.

girls do it better; camrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora