Capítulo 52

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La mañana siguiente, Camila esperaba pacientemente a que todos terminaran de alistarse para poder desayunar juntos y hacer la presentaciones necesarias. Ella, como era de costumbre, había estado lista cuarenta minutos antes que todos y le había alcanzado el tiempo para hacer un par de llamadas y disculparse directamente con algunas personas a las que tuvo que cancelarle citas.

— Necesito que lo llames y le digas que espere a que yo llegue— le indicó Camila a Lilly, a través del teléfono—. Le he dicho como mil veces que no estoy en Nueva York y que hable contigo para concretar una cita, ¡pero sigue mandándome mensajes!

Camila notó por el rabillo del ojo que Charlotte salía de su habitación y caminaba hasta ella con una sonrisa. La fotógrafa la saludó levemente con la mano y le hizo un gesto para que esperara un segundo.

— Me dijo que quería darme unos prototipos de unos lentes para probarlos, pero ya tengo a otras dos compañías pidiéndome que pruebe sus productos... No, ya bloqueé su número y le di de nuevo el del estudio... Aun no sé cuándo vamos a volver. Me dieron el contrato de Lauren y quieren que las fotos salgan dos días después de que termine la semana de competencias, pero tal vez ella quiera quedarse por Normani. No me traje todo el equipo pero tengo lo necesario para tomar las fotografías desde aquí.

Ally y Dinah salieron de su suite, a la vez que Elizabeth lo hacía y al divisar a Camila todas empezaron a caminar hasta ella.

— Bueno, tengo que irme. Arregla todo lo que te pedí y avísame cualquier cosa que necesites— concluyó Camila, sabiendo que Lilly podía tener todo bajo control en su ausencia y que su necesidad de llamarla cada día para ver cómo iba todo era simple paranoia.

— ¡Buenos días!— Saludó alegremente Ally, cuando todo el grupo estuvo reunido en donde se encontraban Camila y Charlotte.

— Hey, ¿cómo amanecen?— Saludó Camila. Charlotte estaba a su lado, ligeramente detrás de ella en busca de algo de protección, al sentirse intimidada por las amigas de su hermana y la mujer a la que pudo reconocer como la madre de Lauren.

— Perfecto. ¿Y ustedes?— Replicó Elizabeth con una sonrisa.

— Estamos bien, ¿no?— Camila obtuvo un asentimiento de parte de todas, y prosiguió a hacer las presentaciones—. Por cierto, ella es Ally, mi mejor amiga. — Camila señaló a la actriz, quien estrechó la mano de Charlotte y luego la de Elizabeth—. Y ella es Charlotte, mi hermana.

— ¡Por Dios! ¡Pero si son dos gotas de agua!— Exclamó Elizabeth, pasando su mirada entre las dos hermanas que tenían gestos y rasgos tan parecidos que era imposible negar su parentesco.

— Bueno, Camila obtuvo la parte artística y yo la inteligencia. Pero por suerte las dos nos quedamos con la belleza— bromeó Charlotte de manera tímida.

— Sin duda es tu hermana— comentó Dinah, soltando una risa. Charlotte sonrío con nerviosismo y volvió a refugiarse cerca del cuerpo de su hermana.

— ¿Tienen hambre?— Preguntó Camila, consiguiendo un asentimiento de parte de todas.

— ¿Y si comemos del fuera del hotel?— Sugirió Dinah—. He visto un lugar cerca que tiene vista a la playa.

— Como ustedes quieran— coincidió Elizabeth. Camila miró de manera inquisitiva a Ally y Charlotte, pero estas solo se encogieron de hombros.

— Vamos a decirle a Jorge entonces— anunció Camila, refiriéndose a su chofer.

— No, creo que podemos irnos caminando. Déjame ir a preguntar el nombre para buscar la dirección.

Dinah se alejó del grupo apenas llegaron al lobby del hotel y se dirigió hacia el área de recepción.

girls do it better; camrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora