Capitulo 10: ¡Bienvenido a la Habana!

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Habana, Cuba 7:24 A.M - 6 de Diciembre

— ¿No quieres que te acompañe hasta que el autobús llege? —

— ... —

El cubano no fue respondido, y volteó su cabeza hacia el volante, revisó la hora en su reloj, faltaba media hora para que Matthew llegara al aeropuerto, la representación de la República de Cuba se encontraba en el central de autobuses de la ciudad.
Condució hacia el aeropuerto, quedaba un poco lejos hacia el norte, ya que los autobuses quedaban en el centro, por fin prendio su radio, escucho bachata para relajarse, hasta lo motivó a mover sus hombros al ritmo, Carlos era un excelente bailarín, es su mayor talento.
El tiempo que se tomó del centro al aeropuerto no fueron más de 15 minutos, se sentía alegre saber que su amigo canadiense venía a visitarlo. Hy
Al momento de llegar, apagó la radio, subió los vidrios del piloto y copiloto, su auto no era muy moderno, eran como muchos en el país, todos provenían del siglo pasado, entre los 50 y 60.
Colocó el seguro y guardo las llaves en sus pantalones de mezclilla, la mañana amaneció un poco fría. Camino tranquilamente a la entrada del aeropuerto, lo pasaron a seguridad para ser inspeccionado, absolutamente nada y siguió adelante.

Se quedó sentado a esperar, miro las pantallas donde estaban los viajes, el de Matthew llegara en menos de 15 minutos para ser exacto.

Recordó el día en que perdonó a Matthew por haberlo confundido con Alfred, y volvió a hacerlo de nuevo cuando este llegó a Cuba. Algún día le dirá el porque de sus confuciones...aunque no sabe cuando llegará ese día para explicarle, es bastante complicado de hecho.

Uso su teléfono celular para poder leer los mensajes de sus hermanos latinos, esta vez estaban intercambiando memes de Donald Trump, Carlos no se resistió en reírse, ya que los que enviaba México eran bastante graciosos.
La otra vez que México envió un meme de Fidel Castro, Carlos lo atacó con un chiste cruel acerca del muro, eso hizo que ya no enviará más imágenes, es común que México y Cuba se peleen por ese tipo de cosas a la vez que son hermanos muy unidos intercambiando culturas, hermanos de danza, música y cine. 

En fin, Carlos volvió sus ojos a la hora; faltaban dos minutos para que el avión llegara a tiempo, volteó a sus espaldas y alcanzó ver un avión que estaba aterrizando en la pista. Se levantó de su asiento y estiró su espalda, se dirigió a la puerta de salida de los viajeros. Escondió su celular en el bolsillo de su pantalón y varias personas salieron, no vehia al chico rubio pequeño de lentes con su oso polar. Volteó a sus lados sin poder notar a la persona, tal vez sólo lo espera con ese osito a su lado.

— H-Hola Carlos... — Saludo Matthew desde abajo. El cubano se sorprendió y rasco su cabeza un poco avergonzado para después darle un abrazo de bienvenida.

— ¡Hola Matthew! ¡Seas bienvenido! — Lo levantó y lo apretó con un poco de fuerza.
—Perdón si no te vi...¿Y Kuma? — miro su maleta a ver si no se encontraba alguna jaula o algo.

—Oh...S-Se quedó en Canadá a ayudar a Matt a decorar la casa —

— Que pena, le guarde helado extra para el...—

— ¿No sería comer el doble de helado esta vez no? —

— Yo puedo comer todo lo que sea, y todo me cabe aquí — Golpeó su estómago como si fuera un tambor.

— Déjame ayudarte con tu equipaje, hermano — Sostuvo con sus dos brazos fuertes ambos equipajes sin ningún problemas. Para llevarlos a la cajuela del auto. Antes de abrir la cajuela, le quitó el seguro a su auto para que Matthew abriera el copiloto. Mientras Carlos colocaba las maletas adentro, el canadiense encontró que la puerta cerrada del copiloto del auto tenía algunos cabellos atrapados, extrañado abrió la puerta y antes de sentarse recogió esos pequeños cabellos, se notaban negros, pero al ponerlos al sol se tornaban pelirrojos.
— Mira Carlos, a alguien se le quedaron los cabellos en tu auto... —

El cubano miro sorprendido y volteó rápidamente hacia el frente. —Ahh...mi carro siempre recoge cosas de los demás, es una buena chatarra — sonrió. Y retrocedió el auto para salir y avanzar para alejarse del aeropuerto.

— Vamos a desayunar cerca de la playa ¿Te parece bien, Matty? —

— M-Me parece excelente Carlos. —

El moreno volvió a prender su radio, transmitían reggaetón, ambos amigos empezaron a bailar todo el camino, estuvo bastante gracioso, un buen comienzo antes de tomar un gran desayuno.

El Símbolo detrás de Cuba (Hetalia Fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora