Decide Tu mismo: Un deseo Puede cambiar el destino. -Editando-

Capitulo 39

Félix

Desperté solo por el mal estar que siendo en el abdomen. Me remuevo incomodo  pero no se quita ese dolor que siento, de a poco voy agarrando mis cinco sentidos y capto el olor a shampoo cerca de mio e instantáneamente abro los ojos y me encuentro con Nathalia a mi lado echa un ovillo abrazando mi almohada. 

El mal estar en mi abdomen no es nada más ni nada menos que las rodillas de Nathalia - y digo, por suerte en el abdomen, si no quedo sin desendensía - Le muevo el hombro levemente pero no responde, entonces es allí donde me empiezo a enojar y la muevo como todo brusco para que despierte

Gruñe por el movimiento y se gira hacía el lado contrario. Piensa Félix, como despierto a una mujer sin querer matarla. Entonces allí es donde se me prendió el foco. Espero salir vivo.

-Nathalia - Le susurro, pero no responde - Nathalia, ¿Me escuchas?

-Otra media hora papi. Deja dormir. 

-Nathalia - Digo mis palabras con sumo cuidado y preparándome mental y psicologicamente para lo que viene - Nathalia tienes que levantarte. 

-¿Por que? Aun es temprano. -Responde adormilada, parece drogada, de seguro aun esta en sueño-

-Nath, tienes algo en el pantalón.

-¡¿QUE!? 

Por instinto tapo mi cara y siento como se para rápidamente de la cama tomando consigo mi almohada. Literalmente arranca todas las sabanas de la cama tirándome abajo, busca desesperada algo en el colchón blanco, pero al no encontrar nada suspira enojada y va a verse en el espejo al baño corriendo, al salir me mira y chilla.

desate la tercera guerra mundial.

-¡¿Por que me dices esas cosas?! ¡Son delicadas Félix! ¡Sabes tratar a una mujer! ¡Te imaginas fuera verdad! ¡¿Te imaginas lo vergonzoso que debe ser para mi que tu me hallas dicho eso y que además fuera mentira? ¡No tienes ni la mínima idea!

-No despertabas y yo...

-¡¿No encontrabas otra forma de despertarme?! ¿Tan mal se siente dormir conmigo que ya quieres que me valla? 

Prepárate Félix. Lagrimas en camino. 

¡ALERTA ROJA!

-¡Con esa cosa no se juega ni en broma! ¡Ni que fueras una chica para saber lo que se siente! Solo imagínate. Tu, en otra cama y te dicen eso de repente ¡ERES UN INSENSIBLE!

-Oye ya, lo lamento. No creí que te afectara de esta forma.

-Se que nunca has vivido con una mujer ¿¡Pero tanto te enoja que este contigo!? 

Antes que yo le responda ella se va corriendo a su habitación y para mejor, llorando. Si mi padre la ve me va a joder el día entero y no quiero.

Del closet sale Plagg con un trozo de queso quien me mira tirado en el suelo.

-Te has pasado.

-¿Tan grave fue?

-Peor.

Suspiro fastidiado, últimamente todo me sale mal y no quiero. Ese no soy yo, soy Agreste. Echo y derecho. Plagg me mira y abre la boca para decir algo, pero luego no dice nada y se retira. 

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-¡Félix! ¡Félix! Tengo algo muy importante que contarte ¡Es urgente! Debes escucharme, ¡Félix! -Grita mi rata negra. Lo veo muy alterado así que dejo la lectura de lado.