Capítulo 33

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Dwight nos dirigió al antiguo teatro Paramount, se dice que el teatro había quebrado y ahora solo era un vacío deposito. Entramos al teatro lleno de polvo y con olor a moho, nos quedamos lejos de una multitud de jóvenes y adultos. En la pantalla se hallaba el logotipo que vi en el teléfono de la morgue. Miré a Jim el cual tenía una mirada de esperar a lo que pasara. En eso Dwight sale al escenario y todas las personas gritan de emoción.

—Esto es raro —dice Harvey.

—Bienvenidos —dice con el micrófono en mano.

—Él es raro —vuelve a decir Harvey

—Ustedes son los nuevos miembros —continua Dwight—. Desde ahora, son socios, son leales a nuestro jefe —los lunáticos con cara pintada gritan con aprobación—. ¿Recuerdan su transmisión de hace dos años —todos rieron—. Veamos.

—Esto no me trae un buen presentimiento, Jim —dice Harvey.

Pero yo estoy concentrada en Dwight. En la gran manto blanco se proyecta a un chico pelirrojo con ojos verdes llenos de locura. Y esa sonrisa, tan maliciosa y cruel.

—Debes irte —me dice Jim tomándome del brazo pero yo sigo mirando el manto.

—¡Saludos, ciudad de Gotham! —dice el Jerome de hace dos años en el proyector. Yo me vuelvo hacia Jim.

—Vete, te hará más daño —me dice Harvey.

—Lo he superado —les digo a ambos—. Ese sujeto no me importa... Lo que me importa es que él está armando un ejercito. Todas esas personas son miembros de Valeska. Y es enfermizo.

—¡GCPD! —grita Gordon mientras Harvey levanta su arma y dispara al techo.

Los lunáticos se acercan a nosotros tratando de empujarnos, peleo con una chica llena de maquillaje, trata de darme un puñetazo pero yo me agacho y le pateo el estomago. Un chico me toma del brazo y comienza a gritar.

—¡Es Isolde Pennyworth, la chica perdida del jefe! —grita pero las personas están desesperadas por salir.

Me doy una voltereta haciendo que su brazo se retuerzo y le doy un puñete en la quijada para luego dejarlo inconsciente. Jim y Harvey corren hacia la salida trasera y yo los sigo.

—Lo perdimos —digo mientras estamos fuera.

—¡Cuidado! —grita Jim. Nos empuja a Harvey y a mí hacia unos tachos de basura mientras los disparos se escuchan—. Es Victor Zsasz —él hablaba con Harvey mientras yo trataba de que las balas no me cayera, por desgracia una rozó mi hombro. Entonces me levanté.

—¡Idiota! —chillé, con mi arma en mano le apunté hacia el cuello, no lo iba a matar lo necesitaba para información, solo hice que le rozara.

—¡Hija de puta! —grita mientras me apunta, yo me agacho, cubriéndome.

—¡Pensé que éramos amigos, Vicky! —le grité, Harvey también rió mientras Jim ponía los ojos en blanco.

—Me quiere solo a mí, ustedes huyan, esto es mi problema —dice Gordon.

—¡Espera! —le grita Bullock. Pero Jim salió por un lugar y se le perdió de vista, Victor se fue, persiguiéndolo.

***

Bullock fue amable al dejarme a la mansión, era las cinco, se supone que mi tío debe estar limpiando ropa. Entré sigilosamente por la puerta trasera, pero cuando me volví, había reunión familiar. Bruce, Selina, y una mujer parecida a ella estaban ahí junto con mi tío.

—Isolde Cosette —regaña mi tío—, acordamos no salidas nocturnas —dice fulminándome con la mirada.

—Técnicamente fue una salida mañanera ya que fue a las cinco de la mañana. Debí haberte dicho, lo lamento. Fui al funeral y luego Jim y Bullock me invitaron a hacer un caso y...

—¡¿Fuiste al funeral?! —me grita. Mierda—. Te prohibí ir.

—Quería ir a ver a Lee y saludarla —me encogí de hombros—. Jim y Bullock me asignaron mi primer caso —sonreí—. ¡Sorpresa!

—Te puede pasar algo, apenas hemos llegado, no quiero verte secuestrada otra vez y luego vengas a llorar pidiendo ayuda —mi sonrisa se desvaneció.

—Alfred —dice la señora, la cual era muy obvio que era la madre de mi amiga—, no seas tan grosero con ella. Un gusto, soy Maria Kyle —ambas estrechamos la mano—. Y tú deberías ser más compresivo, es una joven aventurera.

—Creo que tiene razón —dice mi tío. Abro los ojos como platos, me vuelvo para ver a Selina, ella alza las manos como si no fuera su culpa ¿En serio? ¿Su madre con mi tío? Imposible, ya vi esto con Lee, no quiero que vuelva a hacer el ridículo—. Pero no entiendes lo que ha sufrido —dice murmurándole en el oído.

Bajo la mirada mientras salgo de la cocina, antes de llegar a mi habitación, una mano toma mi brazo y me detiene. Me vuelvo para ver a Bruce.

—Él no quería decir eso... ¿Cómo te fue en tu primer día... adelantado?

—Te lo diré mañana, niño. Estoy muy agotada —él asiente.

—Por cierto, ya he enviado las invitaciones. A los ricos les gusta las noticias temprano —asentí.

Entré a mi habitación, lo mejor será dormir, ha sido un día muy agotador. Sonreí al recordar ver a Victor en mi primer caso, negué con la cabeza, ese calvo se mete en todo. Mi sonrisa desapareció al recordar a Jerome en esa grabación, pensar en él solo me dará pesadillas.





JEROME.

Estaba viéndome en el espejo, la horrible cicatriz que me dejó ese idiota de Gordon. Me vengaré por dejarme con estas cicatrices, se arrepentirá de haberme hecho esto. Todos se arrepentirán de haberme dejado en las tinieblas y ruinas, al escuchar la puerta abrirse, me volví rápidamente. El idiota de Dwight estaba ahí.

—¿Cuantas veces te he dicho que toques? —le grité par luego volverme pero no hacia el espejo, sino hacia mis armas, mataré a ese idiota si sigue molestándome.

—Señor, está aquí —dijo—. La he visto... A la chica, la cual usted añoraba —el arma se me cayó de las manos haciendo que se disparara sola. Entonces me volví—. Cabello castaño, ojos grandes y oscuros. Está aquí, en Gotham, ha vuelto.

—Así que Isolde ha vuelto —dije acercándome a él—. ¿Cómo sé que no mientes? —dije tomándole del cuello.

—Lo juro, señor —dice nervioso—. Soy leal a usted, lo juró. La he visto en la morgue, estaba con Gordon y su compañero. Trabaja con ellos —dice quedándose sin aire. Lo solté para volverme, abrí el cajón en donde estaba su cadena, la tomé y la apreté con fuerza.

—Mi Isolde ha vuelto, y es más que obvio que ha vuelto junto con Wayne —gruñí—. Oh, Isolde, no debiste haber vuelto justo cuando me estoy volviendo más poderoso —dije viendo la cadena—. ¡Dwight! ¿Tienes información?

—Se ha encontrado con Victor, señor.

—Ah, ese idiota. ¿Algo más?

—No que yo sepa, señor.

—Pues busca, quiero saber sus movimientos, todo de ella. Tómale fotos si es necesario, pero sé sigiloso y que no traten de descubrirte, pedazo de idiota.

El idiota se va, dejándome solo. Miro la media luna, y recuerdo la sonrisa la cual tenía esa noche.

—Jerome.

—Dime.

—Te quiero.

Cerré los ojos mientras tiraba la cadena hacia el espejo, éste se rompió. Me acerqué lentamente y miré mi rostro, ella no puede verme así. No puede verme de la manera en la que estoy ahora. Aprieto los puños mientras cierro los ojos, tengo que tenerla, tengo que hacer algo con mi cara y así ir tras ella y tenerla a mi lado como debió ser hace mucho.

INSANE ⎮⎮ Jerome Valeska ⎮⎮Donde viven las historias. Descúbrelo ahora