No me Olvides ✦Vmin✦

Capitulo 41

Narra Taehyung.

Abrí mis ojos al sentir una fuerte luz en mi rostro. Me estaban observando... de nuevo.

Me abracé las rodillas mientras temblaba.

¿Cuánto tiempo ha pasado desde que yo estoy acá?

Quiero irme, ya no quiero estar mas aquí... ¿Por qué me tiene que suceder todo esto a mi? ¿Qué es lo que hice para merecerme esto?
No comía ni bebía algo desde hace semanas o incluso meses, total no podía morir, así que a ellos les daba igual.

Abrieron la puerta de la habitación en la cual yo estaba. Me quede inmóvil mientras ellos se acercaban a mi y me tomaban del brazo para sacarme de ahí dentro y llevarme a otra habitación que era toda blanca.
Me pincharon con una aguja sacándole algo de sangre y luego conectaron algo a mi cuerpo.

— Su ritmo cardíaco sigue siendo normal.

— Ha estado varias semanas sin comer ni beber absolutamente algo... ¿Cómo puede ser posible?

Desde que llegue aquí han intentado de varias formas matarme para ver si de verdad era "inmortal", hacían lo que quisieran conmigo, como si fuera un muñeco o alguien sin vida.
Intentaban ahogarme, drogarme, apuñalarme y varias formas más, muy crueles. Incluso a veces hasta cortaban alguna parte de mi cuerpo, pero luego de una hora ésta se volvía a regenerar.

Hubiera roto el hechizo antes de que todo esto ocurriera, así podría haberme muerto de una vez por todas.

— Si que aguantas mucho tiempo— logré escuchar una voz femenina.— Ahora debes decirnos como comenzó todo esto.

— ¿Por qué... debería decírtelo?

— Algo malo ocurrirá si no lo haces.

— Estás loca... amenazarme con hacerle daño a los amigos de tu hijo y a éste mismo... ¿Qué clase de madre eres?

— Tampoco soy tan cruel, a Jungkook no le iba hacer nada, pero... Jiminnie o Hoseokie... son bastante interesantes también ¿No crees?— sonrió.

— Pobre de Jungkook... por... por tener una madre como tú— cada vez me costaba más hablar.— Te pudrirás en la cárcel y nadie te visitara... ni tu propio hijo o... esposo.

— Yo cuidaría un poco lo que dices— se acercó a mi rostro.— Que pena que un chico así de lindo como tú, tenga que pasar por esto.— Yo le escupí en el rostro y ella se alejo rápidamente— No debiste hacer eso— se limpió con un pañuelo.

Yo comencé a toser sangre, como la mayoría de los días.

— Eso será suficiente para meternos en sus recuerdos. Encierrenlo de nuevo.

Vinieron rápido hacia mi y me encerraron nuevamente.

Yo abrace de nuevo mis rodillas mientras comenzaba a llorar.

En el momento en el que me quede dormido, ellos entraran en mis recuerdos mediante una droga que me han metido. No quería, porque al hacer eso... yo también recordaba todo. Todo lo que había sufrido también ese tiempo.

Jimin... ¿Qué estará haciendo en este momento? ¿Cómo estará?

Seguramente estará muy preocupado al igual que los demás. Debí dejar alguna carta antes de irme.

Lo extraño. Extraño ver que cuando sonreía sus ojitos se achinaban más de lo normal. Su risa pegajosa que hasta estando de mal humor o triste comenzabas a sonreír o reír al escucharlo.

Los extraño a todos.

Abrieron la puerta de mi habitación nuevamente, asustándome.

— Mira esto ¿Te recuerda a algo?— me limpié las lágrimas de los ojos mientras veía la pantalla de su computadora portátil.

— ¿Q-qué?... E-esa es la casa de... ¡¿Qué le hicieron?!— intenté con todas mis fuerzas acercarme a ella. Juro que la hubiera matado si no fuera por estas malditas cadenas que tengo en los pies.

— Tranquilo chico, no les hemos hecho nada... por ahora. Esto solo fue una advertencia por lo que hiciste hace un rato.

— Juro que si les llegan hacer daño, yo mismo los mataré a cada uno de ustedes con mis propias manos.

— ¿Me estás amenazando?— se rió.— Ay... pensar que de niño eras tan inocente y bueno, mira ahora, parece que te va agarrar rabia.

— ¿Qué? ¿Cómo sabes sobre mi niñez?

— Hay muchas cosas que se sobre ti.

— ¿Por qué... por qué me están haciendo esto?— volví a sentirme débil.

— Porque esto es algo nuevo para toda la humanidad ¿Te imaginas a toda las personas siendo inmortales? Sería fabuloso, pero para eso te necesitamos a ti.

— Eso es una tontería... t-todos en algún momento tenemos que morir... a l-la muerte no hay que evitarla— algo comenzó arder por todo mi cuerpo.

— Me gusta lo que piensas, pero lamento informarte que no todos piensan igual.

Me retorcí en mi lugar, ya que el dolor cada vez se iba haciendo más fuerte y mi respiración se iba volviendo más pesada.

— Veo que está haciendo efecto.— Mis ojos comenzaron a cerrarse— Ten un lindo sueño Taehyung.

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