Abrí los ojos rápidamente, aun me encontraba en la misma habitación de hace varias semanas. Estaba temblando, pero no era por el frío, y de mi frente caían pequeñas gotas de sudor.
Recordaba todo lo que había olvidado.
La cicatriz que llevó años para cerrarse y curarse, volvió a abrirse e infectarse. No quería recordar con detalle todo aquello.— Despertaste... si no lo hacías tendría que llevarte dormido, por lo que sería mas complicado— me sobresalté al escuchar una voz al lado mio.
— ¡H-hyung!— Él se quitó la mascarilla que llevaba puesta.
— ¡Si! Este hyung vino a llevarte de nuevo a casa— las lágrimas se fueron acumulando en mis ojos.
— P-pero les harán daño si me sacan de acá.
— No pasará nada, la policía está por venir, pero debemos irnos antes.
— ¿Cómo me encontraron?
— No es momento de hablar, tenemos que irnos— se acercó a mi y me ayudó a levantarme.
Abrió la puerta sigilosamente y comenzamos a caminar por un largo pasillo.
— ¿P-pero y las cámaras? Nos pueden ver.
— Un amigo que sabe de estas cosas, las apagó. Cuando se den cuenta de eso ya será demasiado tarde.
— Oh... ¿Jungkook... cómo esta? Pues... su madre...
— Si... le costó creerlo, pero no es como si su relación con ella fuese perfecta.
— Pero aun así sigue siendo su madre...
— Igual no es su madre verdadera, es su madrastra.
Escuchamos como varias personas corrían hacia nosotros.
— Mierda, puedes correr ¿cierto?— asentí— pues éste es el momento de correr— agarró mi brazo y comenzó a correr.
Cuando logramos salir afuera, por fin me pude sentir libre luego de bastantes días encerrado ahí dentro. Noté que la brisa ya no era fría, sino que era cálida y el sol aún mas fuerte que antes
¿Cuánto tiempo había pasado?
Sentí como de repente mis piernas se iban debilitando.
— Hyung... n-no puedo correr más.
Cada vez iba perdiendo más fuerza.
— Aguanta un poco más, ya casi llegamos.
Levanté la vista, notando como un auto más adelante se acercaba hacia nosotros.
— Sube— dijo Hoseok mientras abría la puerta del auto.
Subí y no tuve tiempo ni de mirar quien conducía, ya que mi vista comenzó a nublarse.
💩
Me desperté al sentir algo frío en mi frente. Recordé lo que había sucedido hace un rato y deseé que no haya sido un sueño, así que lentamente comencé abrir los ojos. Estaba en mi habitación, entonces no había sido un sueño... o tal vez todo hasta ahora lo es.
Toqué lo que tenía en mi frente, era un paño humedo, luego me volteé, encontrándome con Jungkook, quien me miraba con tristeza.
— ¿Jungkook?— me emocioné al ver a mi amigo. Él se acercó a mi y me abrazó.
— P-perdóname hyung... e-ella te hizo todo esto y yo no lo supe hasta hace unos días.
— No es tu culpa— se separó de mi— no lo sabias.
— P-pero yo-...
— Quiero estar un rato solo... por favor— le supliqué.
— Está bien, entiendo... vendré en un rato ¿si?— no le respondí.
No quería que piense que todo esto era su culpa o que estaba molesto, pero de en serio quería estar solo y pensar.
Cuando él salió y cerró la puerta, por fin deje que las lágrimas salieran.
Me quedé todo el dia encerrado en mi habitación, incluso el día siguiente.
Estaba muy feliz por haber regresado, pero me costaba ver a los demás sin ponerme a llorar en frente suyo, además de eso, quería estar solo para intentar olvidar todo eso de nuevo. Aunque era más que obvio que no lo olvidaría por segunda vez.
La luz iluminó mi habitación por lo que supe que alguien había entrado.
— Jungkook, ya te dije que no quiero na...
— T-TaeTae...— lo vi ahí parado frente a la puerta con su rostro lleno de lágrimas.
— Jimin...
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No me Olvides ✦Vmin✦
FanfictionAntes su vida era normal, pero al cumplir los 20 años, ésta se detuvo. Todos sus conocidos y familiares empezaron a envejecer mientras que él seguía igual. Él no podía envejecer. ¿Cuantos años pasaron desde eso? No lo sabe, perdió la cuenta, pero si...