SAGA LEGACY
LIBRO I
A este trío de hermanas las une algo más que la sangre. Un hombre, para ser más específicos.
Mientras que la hermana mayor, superficial y la más hermosa, lucha por lograr una posición socialmente destacada. La segunda hermana may...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
En el gran salón se llevaba a cabo un gran baile de cumpleaños, y en una habitación cercana había dos mujeres que no se conocían en persona. Una mesita entre ellas dos y un sirviente que después fue despachado con solo un movimiento de manos.
La mayor de ellas era imponente, de rasgos únicos que rebasaba la edad de 30. Su aire era majestuoso, era domínate, y sin embargo, no dejaba de ser cálido.
La otra se mantenía sentada en una posición apropiada, con todo el orgullo de una reina y la belleza de un ángel.
Silencio.
De pronto, la mayor de ellas lanzó sin piedad una botellita de vidrio en la mesa. De forma instantánea se rompió al tocar el suelo a poca distancia de la menor
— ¿Qué significado tiene esto? ¿Me lo puedes decir?— preguntó la reina mientras cruzaba los brazos. No había pizca de furia o preocupación en su voz y expresión. Ambas eran neutrales.
— Significa lo que significa. Ni más ni menos. Después de todo el tiempo que estuvo utilizándolo, ¿cómo es posible que su señoría no esté informada de él?—.
La reina Claire sonrió de lado cuando Ella se limitó a decir "su señoría" en lugar de todo su título. Semejante insulto le hizo hervir la sangre, pero aun así se contuvo.
— En tal caso, pido disculpas por mi ignorancia. Por favor, ilumíname — La reían Claire respondió con una sonrisa amigable, sin embargo, sus ojos decían otra cosa.
— Su señoría está jugando conmigo ¿no es así?—.
— No querida, yo no juego. Soy una reían, los otros mueven las piezas por mi — respondió con una sonrisa antes de señalar el líquido que se había esparcido por el suelo y preguntar. — Ahora. ¿Podrías iluminarme?—.
— ¿Cómo se supone que yo responda a sus dudas? ¿Cómo podría está sierva saber más que usted sobre la utilidad de esté veneno?—.
La reina Claire sonrió de lado: — ¿Estas amenazándome, pequeña? — dijo ella, divertida.
— Si — respondió la menor.
Su respuesta fue tan rápida y directa que cualquiera quedaría mudo. Excepto la reina, ella estaba intrigada por el descaro pero no sorprendida, Claire había visto a muchas mujeres con esa actitud pero nunca a alguien como ella.
La paciencia de la reina terminó. — Es muy gracioso ver como un animal piensas que tiene la ventaja sólo por tener un poco de suerte. Es patético —.
—... y es porque solo trabaja con animales que sus secretos se filtran, ¿Sabe? No fue difícil enterarme de todo lo que usted hacía en "secreto" gracias a que las paredes hablan incluso de día—.
— Eso es normal. La servidumbre es muy elocuente y más eficaz que un espía — se burló la reina Claire con una sonrisa.
La menor no lo tomo muy bien. Sobre todo porque no entendió el chiste. Su sonrisa se torció un poco.
