C43 ENCIERRO

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Pasaron algunos meses antes de que Kit caminara nuevamente sin problemas.

Durante la primera semana Annie estuvo muy inquieta y sin poder dormir bien, despertando de vez en cuando durante la madrugada. Su cuerpo había pasado tanto tiempo lejos de las infusiones de su hermana que la desintoxicación fue casi completada. Pasaba más tiempo despierta que dormida, aunque parte de esto era el miedo de que la verdad fuera descubierta, ya que no fue sino hace unas semanas cuando reviso detrás del espejo y no encontró nada.

Una parte de ella tenía miedo de que Kit lo malinterpretara todo y creyera que ella tuvo algo que ver con su tardía recuperación, la otra parte estaba preocupada de que su hermana sea descubierta, y la tercera parte tenía miedo de que Kit muriera, porque según el resto del mundo fuera de la habitación, él estaba muy delicado de salud, además de que le prohibió verlo. ¡A ella le prohibió ir a visitarlo!

Hoy, sin embargo, después de varios meses Kit vendría personalmente a visitarla. Eso la mantuvo muy estresada. Las uñas habían sido mordidas al punto de casi desaparecer, el cabello ha sido tocado y estirado tantas veces que comenzaba a perder algo de él en la parte de la frente.

Las sirvientas preparaban la sala que se hallaba en su habitación. Sacudiendo aquí y haya, moviendo y acomodando, sirviendo y revisando que todo sea perfecto. Tal y como lo pidió Kit.

— ¡Mamá! — gritó Anthony, quien recientemente había cumplido los tres años.

Anthony era tan inteligente pero también un juguetón, razón por lo que no prestaba atención a la mezcla de estrés y miedo que desbordaba Annie, aunque si lo detecto. El pequeño de tres años corría alrededor de toda la sala, metiéndose debajo de una mesa y saliendo por el otro lado, para luego hacer lo mismo con un sofá... ya había "atravesado" todo, así que fue a la habitación y se metió debajo de la cama mientras que Annie lo seguía.

— Anthony, deja de jugar en mi habitación. ¿Por qué no sales al patio? —.

— ¡El mostlo! ¡Nana me busca! — dijo entre risas mientras salía de debajo de la cama al darse cuenta de que no era un buen escondite, entonces abrió de par en par el gran armario y ahí se metió, cerrando las puertas detrás de él.

De pronto la voz de la nana de Anthony se escuchó por fuera de la habitación, claramente lo estaba buscando porque había escapado de ella.

El corazón de Annie se aligero un poco y se alegró. Este niño solo tenía tres años y ya corría por todo el castillo y los jardines... De pronto sintió que eso no era demasiado bueno, un vistazo al futuro le hizo ver que un niño tan hiperactivo como Anthony traería problemas sino se cuidaba adecuadamente.

Mientras pensaba en cómo ir canalizando la hiperactividad de Anthony a futuro las puertas se abrieron abruptamente y entró Kit sin mostrar el más mínimo respeto a la privacidad, algo que no había hecho antes con ella.

— Salgan todos. Quiero hablar a solas con mi prometida — ordenó Kit y todos salieron como una ráfaga de viento.

Escuchar a Kit decir "prometida" era un deleite que provocaba al corazón de Annie acelerarse de la emoción. Ahora, la misma palabra le acelera el pulso pero no en el sentido romántico que ella esperaba. Esta vez, de la palabra no fluía dulzura, era más un "prometida" a secas.

Cuando Kit entró, ella se había dado la vuelta, dando la espalda al ropero, ahora que escuchaba que la puerta del ropero se abría, lentamente ella lo cerró. Annie no sabía qué era lo que iba a pasar pero no se arriesgaría a que Anthony saliera lastimado. Así que cerró con seguro el armario cuando Kit se giró en direcciones a la sala de la habitación y susurro entre el hueco de las puertas: — No hagas ruido, Nene. Volveré y te sacaré ¿Bien?—.

LEGACY: Las Hermanas TremaineDonde viven las historias. Descúbrelo ahora