13. Where Are You?

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Jade's Pov


¿Pelearon? Miles de escenas aparecen por mi cabeza. No sé a cuál idea hacerle caso. No puedo imaginarme, sin dolor, a Perrie cometiendo un error de ese tamaño.

- ¿Qué quieres decir con eso? – le pregunto tomando su rostro entre mis manos.

- Estábamos ebrias incluso creo que drogadas. Había éxtasis, si no mal recuerdo. De repente el tema de papá salió a relucir... Hasta ese momento creí que ella le guardaba rencor.

- ¿Te refieres a qué ella aún le quería? – pregunto atónita.

- Me dijo: "Tú no conoces sus razones. Jamás te has dado la oportunidad de hablar con él." Nunca sentí tanta rabia. ¿Cómo pretendía que hablara con él? No me iba a sentar a tomar el té acompañado con galletas, ¿o sí? Apenas te atrevías a estornudar a su costado y te tiraba al suelo de una bofetada. Pero claro, ella jamás tuvo la necesidad de ocultar moretones, cortes y huesos rotos... Como supondrás, nos pusimos a discutir, a gritar... – enreda su cabello rubio entre sus dedos ahora que he liberado sus manos – Se molestó tanto que se paró de la silla sólo para volcar la mesa. Todo lo que había sobre ella cayó al suelo y los cristales se esparcieron por el suelo. Estaba tan exhausta que salí de la cocina para tomar mis cosas, aún me detesto por lo que le dije: "Ese hombre que tanto defiendes es la causa de nuestra desgraciada vida, nos trajo a este mundo para hacernos sufrir. Perdimos a Jonnie, ¡murió en mis brazos! ¿En serio sigues creyéndote el cuento de que el auto de mamá se volcó solo por qué sí? ¿Quién la estaba acompañando en el auto? ¡Él la mató! Y tú eres tan tonta que no lo aceptas... Si vas a seguir creyendo que es un buen hombre, estás más perdida de lo que creí..." "¿Y qué pretendes que haga?", preguntó. Créeme, Jade, deseo con toda mi alma no haberle dicho eso... "Morir y dejar de estorbar." Eso fue lo que le respondí. Ni siquiera la miré, no tuve intención de retractarme. Simplemente tomé mis cosas y me marché al bar más cercano que encontré. Amanecí ahí y con mucha dificultad regresé a casa. Después de varios tropiezos logré llegar a la puerta y abrirla. Entre en la casa y todo estaba callado. La llamé un par de veces, pero nada. Supuse que se habría marchado a casa de alguien más. Subí a mi habitación y al entrar busqué ropa limpia y una toalla. De ahí fui al baño... – de inmediato deja la vista fija en el suelo y respira pesadamente – Cuando quise ponerme las sandalias frente a la puerta del baño... vi que estaba entreabierta... Abrí la puerta con un empujón y la vi. Ella estaba tirada en el suelo y todo el azulejo estaba repleto de sangre... Me arroje al suelo junto a ella... Intenté que reaccionara pero incluso su cuerpo ya estaba tenso y sus mejillas frías como hielo. Yo hice que se suicidara, Jade... Le pedí que muriera...


- Así que... ¿Cuándo la conoceré?

Ruedo los ojos ante la insistencia de Jesy. Vamos rumbo a mi consultorio ahora que la he recibido en la entrada.

- Jesy, ya te lo he explicado. Es complicado y debes comprenderme – ahora ella rueda sus ojos.

- Está bien... Entonces, cenaremos en la esquina, ¿cierto? – asiento levemente. Judy se acerca a nosotras con una sonrisa.

- ¡Srita. Nelson! Qué alegría verla por aquí. – saluda.

- Lo mismo digo, Ju. Esta estricta joven me ha dejado visitarla – le dice sonriendo.

- Pues últimamente no lo es tanto... – coincide Judy – Y sobre eso, doctora, la están esperando en su oficina.

𝑆𝑡𝑜𝑟𝑚 - 𝐽𝑒𝑟𝑟𝑖𝑒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora