𝑆𝑡𝑜𝑟𝑚 - 𝐽𝑒𝑟𝑟𝑖𝑒

54. Secret

Capítulo Final

Jade's Pov

- El avión está por despegar. - le digo a Jesy por el teléfono.

- ¿Y por qué carajos le dijiste a Perrie que te ibas ayer? ¿Cómo te atreves a esperanzarla así? - me regaña con furia marcando cada palabra.

- ¿Qué querías que le dijera? ¿ Qué llegaría? - pregunto molesta.

- ¿Tan difícil era ser honesta con ella? - odio que tenga razón. - Ahora sí me decepcionaste, Amelia.

- Perdona, pero no supe qué hacer. Te llamo cuando llegue a Londres, ¿si? Ya están pidiendo que apaguemos los teléfonos.

- Buen viaje, Jade.

Me siento en mi lugar y cierro la puerta de mi cubículo. Me acomodo bien y recargo mi cabeza en el hombro de James. Entrelaza nuestras manos y me siento más segura.

- Oye, es muy cómodo este avión, ¿es eso normal? - pregunta con diversión.

- Supongo que no, pero ser yo tiene sus ventajas. - le respondo. Hundo mi rostro entre su cuello y lo beso. Tiemblan ante el rose. - ¿Te pongo nervioso? - me burlo.

Me alejo un poco para ver su cara, se sonrojó. 

- Oh, vamos, amor, no te pongas así. - le digo besando sus labios con lentitud. - Creí que eras menos temeroso... - le beso de nuevo tentándolo.

- Y yo creí que eras menos explosiva. - responde siguiéndome el juego. - ¿Esto se puede hacer aquí?

- No sé, pero ¿por qué no lo intentamos? - me siento sobre sus piernas.

- ¿Segura que quieres hacerlo? - pregunta cuando siente que desabrocho su cinturón.

- Hagámoslo antes de que me arrepienta, ¿sí? - sin pensarlo dos veces ataco sus labios.

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Perrie's Pov

- Bien, Pezz, debes estar tranquila, sé que Leigh te defenderá bien. - me dice Jesy intentando relajarme. Yo estoy en mi mesa de defensa y ella atras con el resto de la gente.

- ¿Llegará Jade? - le pregunto esperanzada.

- No lo sé, pero si no llega sé que te está mandando toda su buena vibra. - asiento poco convencida.

- Todos de pie. - dice el guardia para recibir al juez.

Una vez que entra todos se sientan.

- Buenos días, hoy se lleva a cabo el juicio del caso 1689 - 09 El pueblo y Perrie Louise Edwards contra Alexander Edwards. Hagan pasar al acusado, por favor. - todos se quedan en silencio y a mi se me revuelve el estómago.

Él entra de manera orgullosa y altanera, realmente se siente realizado con toda la atención que está recibiendo.

- ¿Cómo se declara el acusado? - pregunta el juez.

- Culpable, su señoría, de haber dado vida a tan hermosa señorita. - ruedo los ojos con exasperación.

- Señor, no estamos para bromas, por favor responda.

- Inocente, señoría.

- Bien, ahora me gustaría que subiera para declarar. Señorita Pinnock, si es tan amable. - la morena asiente y se acerca a dónde ya está sentado Alexander.

- Vaya, la pequeña Lee, ¿qué tal tus padres?

- Señor Edwards, - dice Lee con voz potente - ¿sería tan amable de decirnos en dónde estuvo durante los tres meses que su hija desapareció?

- En casa, de arriba a abajo... No es fácil algo así, ¿sabes?

- ¿Podría definir "de arriba a abajo"? - pregunta con seriedad.

- Igual que el cuerpo de Perrie sobre el mío. - sus palabras desatan exclamaciones de asco y disgusto, yo sólo cubro mi rostro apenada.

- ¿Quiere decir que mantuvo relaciones con ella?

- ¡Oh, si! Es maravillosa...

- Bien, ¿podría explicarme en qué consistían sus visitas a Perrie en el lugar que estaba cautiva?

- Placer, Lee, placer para ambos, ¿no es así, Pezzie?

- Señor, manténgase a responder a la abogada, por favor. - le dice el juez.

- Bien, gracias por esas respuestas. Ahora quiero que volvamos a las fechas en que falleció su hijo mayor, Jonnie Edwards, más exactamente al día en que murió su esposa, ¿podría contarme cómo pasó el accidente?

- Íbamos de camino a un restaurante, todo iba bien hasta que Debbie comenzó a llorar, ¡Dios! ya era suficiente, un mes entero de lágrimas y no paraba... La regañé, pero siguió la tomé del cuello y tiré de ella muuuuuy fuerte. El auto se descontroló y me oculté en los asientos de atrás. Y sí, estaba riendo por lo ocurrido.

Las nauseas me atacan ante su crudeza.

- Por último, señor Edwards, ¿qué le hizo a Joanna Edwards?

- La ahorqué. 

- ¿Por qué? - le pregunta Lee visiblemente asqueada. 

- ¡Quería llevarse a mis hijas a otro país!

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Jade's Pov

- ¿DE VERDAD? - exclamo en el teléfono. - No puedo creerlo. ¿Cómo está ella?

- Muy aliviada, fue duro, pero lo enfrentó con mucha valentía.

- No esperaba menos de ella. - James besa mi hombro desnudo y me río.

- Creo que te llamo después. - dice Jesy.

- No, Jess. - le pido.

- Tranquila, comprendo, sólo debo decirte que hoy haré lo de Perrie, ya no quiere esperar.

- Jesy... - el jodido nudo regresa a mi garganta - Yo quería despedirme...

- No quiere que lo hagas, pero cuando regreses te contaré un secreto. - dice con lastima - Le diré que la quieres, o no. Te prometo que está en buenas manos.

- Jess... ¡JESY! - exclamo cuando escucho el tono.

- ¿Está todo bien? - me pregunta James.

- Creo... creo que no lo sé... - suspiro - Iré al baño, te alcanzo en el restaurante. - beso su frente y me enredo en la sábana para irme nuevamente al baño para abrir la regadera.

Sin saber que hacer, simplemente lloro, me ahogo en mi lamento, en mi dolor, en mi tristeza. En minutos ella ya no sabrá que existí en su vida. Me olvidará y yo me dedicaré a llorarla cada día de mi vida. 

Pero de pronto, una pizca de esperanza se instala en mi destrozado corazón, ¿cuál es el secreto que mencionó Jesy?