Capítulo 6 *

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No tenemos opción!
(Narra Regina)

Al salir de terapia intensiva, de ver a Gerardo, me dirigí a la sala de espera y me di cuenta que Emiliano había llegado y estaba con Ximena, no se había dado cuenta que yo estaba ahí, no quise interrumpirlos porque Xime lo necesitaba mucho en este momento. Aprovechando que estaban juntos, llamé a Daniela


— Hola ¿Daniela dónde estás?

— Regina, estoy en la cafetería, vine por un café para Xime, ¿Necesitas algo, quieres un café también?

— No, gracias, cuando subas, quiero hablar contigo — Me acerqué a donde había dejado a Ximena con Emiliano y me senté en un sillón cerca de ellos.

Emiliano me miró, se levantó y me abrazó, se sentó a mi lado y secó las lágrimas que rodaban por mis mejillas

— Mamá, Ximena me contó que Gerardo entró en coma, lo siento mucho

Yo sólo asenti, y miré a Ximena, volví mis ojos a Emiliano — Gracias por estar aquí, a Xime le hará bien estar contigo y saber que la apoyas

— ¿Quieres que te traiga algo de comer? Dime lo que necesites — sonreí

— No gracias, no tengo hambre, pero creo que lo mejor es que te lleves a Xime a la casa, esto no le hace bien al bebé, y además necesita descansar

— Si, lo mismo pens, yo la llevo y la cuidaré, pero tu también necesitas descansar, yo se que no quieres separarte de Gerardo, pero creo sería mejor si vas a la casa y duermes un poco y así vuelves mañana

— Por ahora llévate a Ximena, yo me quedaré con Daniela aquí un rato más

— Esta bien, te quiero

— Te quiero Emi, gracias — se despidió de mi, se acercó a Ximena y la llevo a casa, unos minutos después llegó Daniela

— ¿Dónde está Ximena? Estaba qui hace un ratito

— Si, Emiliano se la llevo a casa, creo que estará mejor allá

— Es lo más sano — se sentó junto a mi — Le traía un café, pero creo que lo necesitarás tú

Acepte el café, suspiré profundo, lo que tenía que hablar con Daniela era muy importante. Estuve varios minutos sin decir nada, sólo pensaba en Gerardo, y en la decisión que había tomado, Daniela rompió el silencio — ¿Viste a Gerardo? — La miré, cerre los ojos tratando de ser fuerte y empeze a contarle

— Si, parece que sólo estuviera dormido, le hablé porque sentía que él me escuchaba y pues le prometí que cuidaria a Xime, y que vendría todos los días — me detuve y limpié una lágrima que acababa de rodar por mi mejilla — Daniela, creo que haré lo que me propones

— ¿De verdad?, Regina se que es fuerte, pero sigo pensando que es la mejor decisión

— Si, hablaré con el director del hospital para que arreglemos la estancia de Gerargo aquí, creo que entenderá, mañana hablaré con los demás, tengo que hablar con Ximena también, ella lo aceptará — solo esperaba que todo saliera bien

— ¡Bien! Regina creo que hoy ha sido un día muy pesado, debes descansar, mañana te esperan muchas cosas y te espera Gerardo, debes estar fuerte

— Primero, pasaré a hablar con el doctor, luego me iré a la casa. Mañana Gerardo estará muerto para el resto del mundo

Un Amor Para Siempre || EditadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora