Dieciocho; VMAs

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Solté un fuerte suspiro mientras miraba por la ventanilla. Los nervios me estaban matando y no podía parar de juguetear con los anillos que llevaba en mi mano.

—Blair, ¿puedes dejar de mover la pierna? —Me pidió mi representante, sentado a mi lado—. Estás empezando a ponerme de los nervios.

—Oh, lo siento —Sonreí sarcásticamente—. Es solo que hoy actuaré para millones de personas que estarán viendo los premios, no es como si fuese la gran cosa. —Rodé los ojos.

Escuché la risa de Cole desde los asientos delanteros del vehículo.

—Tienes que relajarte, ¿qué harás sino cuando te vayas de gira y tengas que dar varios conciertos en una misma semana?

—Probablemente moriré —contesté tras unos segundos pensando en ello.

—Más te vale no hacerme eso. —Me señaló con el dedo.

—Está bien, intentaré no morirme. —Reí.

De repente empezamos a escuchar mucho jaleo, lo que quería decir que ya estábamos muy cerca de la alfombra. Miré de nuevo por la ventana y vi a toda la gente que se encontraba detrás de las vallas.

—Es increíble... —murmuré mirándoles.

—¿El qué?

—Toda esta gente, deben llevar horas aquí ya. —Me volví hacia él.

—Bueno, tú conoces el fenómeno fan mejor que ninguno de los presentes, ¿no? —Me miró burlón.

—Ya estamos... —Rodé los ojos.

Siempre tenían que acabar recordándomelo, como si no tuviese suficiente con verle esta noche.

Finalmente el coche se detuvo y llegó el momento de bajarse de éste. En cuanto la puerta se abrió el jaleo de fuera se multiplicó por tres y bajé con una amplia sonrisa.

Una vez fuera alisé bien mi falda. El conjunto que había escogido para aquella noche era de dos piezas, pero parecía un vestido. La parte de arriba era un simple top negro de cuello halter y la falda era larga y holgada; a rayas verticales de color negro y morado, y una gran abertura lateral, dejando a la vista mi pierna izquierda.

Como siempre, me dirigí hacia algunos fans que chillaban mi nombre para firmar algunos autógrafos, hacerme fotos e intercambiar algunas palabras con ellos. Al fin y al cabo, como había dicho Rick en el coche, les comprendía y, aunque me parecía mentira que todo aquello fuese por mí, sabía que aquellos pequeños gestos míos significaban mucho para ellos.

—Blair, tenemos que ir ya. —Me avisó Cole a mis espaldas.

—Está bien —Posé para la última foto—. Tengo que pasar por el photocall, muchas gracias por haber venido, chicos. —Les sonreí.

Cada uno dijo una respuesta distinta, por lo que no pude entender bien qué decían y me causó algo de gracia. Agité mi mano despidiéndome de ellos con una sonrisa y fui con Cole y Rick.

El momento que menos me gustaba había llegado y tuve que atravesar aquella alfombra roja, siendo atacada por cientos de flashes que siempre me dejaban algo aturdida y teniendo que escuchar como chillaban mi nombre para que les mirase.

Por suerte aquello terminó pronto, aunque no podía relajarme aún porque todavía tenía que conceder alguna que otra entrevista.

—Tenemos con nosotros a Blair Haden —El entrevistador habló a la cámara antes de dirigirse hacia mí—. Hola Blair. —Me sonrió.

Teenage Dream • jb [1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora