Veintiséis; Las fotos

7.9K 368 165
                                    

Gruñí cuando la alarma de mi teléfono empezó a sonar. A pesar de que anoche me había ido a dormir temprano y en principio estaba bastante descansada detestaba con todo mi ser ese ruido. La desconecté rápidamente para no seguir escuchando aquel sonido infernal y me incorporé frotando mis ojos.

Sabía que si me quedaba demasiado tiempo remoloneando en la cama terminaría por volverme a dormir, así que salí de ésta para adentrarme en el baño y darme una ducha rápida que me ayudó a espabilarme un poco. Regresé a la habitación con tan solo una toalla envolviendo mi cuerpo.

Coloqué mi maleta sobre la cama y la abrí para escoger lo que llevaría hoy. Como sabía que tras el desayuno iríamos a disfrutar de la piscina del hotel me puse directamente un bañador negro y encima un mono corto de color naranja y hombros caídos. Finalmente recogí mi pelo en una coleta alta y tras coger mi teléfono salí de la habitación.

Caminé por la amplia galería hasta llegar al comedor. Una vez allí traté de dar con Liv y al no verla probé suerte en la terraza que tenían.

—¡Blair! —Me llamó haciendo aspavientos con sus manos.

Ante el chillido de mi amiga varias personas que se encontraban allí desayunando se giraron hacia mí y alguna que otra me reconoció.

Algo avergonzada me dirigí hacia donde ella se encontraba.

—¿No podías chillar más? —Suspiré sentándome frente a ella.

—Hay bastante gente aquí, quizás no me veías. —Se encogió de hombros.

—Por eso mismo no deberías haber chillado mi nombre, ahora saben quien soy. —Miré a los lados, dando con varias personas que aún me miraban.

—Dato curioso, se habrían dado cuenta hubiese o no chillado tu nombre. —Sonrió sarcásticamente.

—Lo que sea. —Agité la mano.

—Mira, te he pedido un batido de frutas.

Liv, como siempre, tan rápida en cambiar de temas de conversación.

—Gracias. —Sonreí levemente cogiéndolo para darle un sorbo. Estaba muy bueno.

—También he traído tostadas y mermelada de varios tipos. Si quieres alguna cosa más dentro tienen una mesa enorme.

—Sí, la he visto —Asentí—. Pero creo que con esto ya tengo suficiente.

Nos mantuvimos en silencio durante unos instantes, mientras yo me preparaba un par de tostadas con mermelada de fresa y melocotón y Liv comía de su bol con cereales, yogurt y frutos rojos.

—Entonces... —Liv rompió el silencio— ¿Has visto las fotos?

—¿Fotos? —Fruncí el ceño— ¿Qué fotos? —Le di un mordisco a mi tostada.

—Bien... eso debe ser un no. —Limpió su boca con una servilleta.

—¿De qué fotos hablas? —pregunté ahora más intrigada.

—Entra a Twitter —Dejó la servilleta a un lado—, antes estaba repleto de ellas.

Algo extrañada cogí mi móvil de encima de la mesa y tras desbloquearlo entré a la aplicación de la famosa red social.

—¿Qué se supone que tengo que buscar exactamente? —Aparté la vista de la pantalla para mirar a mi mejor amiga—. Sigo a mucha gente y cada uno estará hablando de lo suyo.

—Trae. —Extendió su brazo para que le diese el teléfono y así lo hice.

No tardó demasiado en devolvérmelo, solo le tomó unos segundos encontrar lo que estaba buscando.

Teenage Dream • jb [1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora