Teenage Dream • jb [1]

Cuarenta y cinco; Biebers

19 de diciembre
San José

—Necesito que vengas ya. —Fueron las primeras palabras que pronunció mi mejor amiga cuando contesté a su videollamada.

—¿Por qué? —Fruncí el ceño sentándome en la cama de la habitación de Justin.

—Esto es tan aburrido... —Alargó la a del tan, dramatizando.

—Eres una exagerada. —Negué con la cabeza sonriendo.

—De eso nada —Se dejó caer sobre la que reconocí como su cama en la casa de sus padres—. Tienes que venir a Houston ya.

—Hoy es el último concierto, mañana estaré allí.

Cada año Liv y yo volvíamos a Houston para pasar las navidades con nuestra familia y en esta ocasión no sería distinto.

—Quizás debería haberme quedado unos días más trabajando en Los Ángeles... —murmuró.

—Liv, debes ser la única persona en el mundo que se queja de que le den vacaciones antes de lo previsto —bromeé.

—¿Vacaciones? De eso nada —Negó con la cabeza—. Saben que podría encargarme de los asuntos de la web y la aplicación de la tienda aunque estuviese en Japón, así que no les importa que lo haga desde allí o desde aquí.

—Bueno, pero no tienes que estar pendiente de eso todo el día. Puedes ir a visitar a tu familia o a nuestros amigos. —Le sugerí.

—A mi familia ya la veré durante las fiesta y en cuanto a nuestr- Oh Dios mío. —Mi amiga abrió los ojos como platos.

—¿Qué pasa? —Fruncí el ceño.

Me di cuenta de que la vista de Liv estaba fija a mis espaldas y al girarme me di cuenta de lo que pasaba.

—¡Justin! —Le advertí girándome para que no estuviese en el campo de visión de Liv.

—¿Qué pasa? —Sujetó mejor la toalla que colgaba de sus caderas.

—Que estoy hablando con Liv. —Señalé con mis ojos el móvil en mi mano.

—Oye, que a mí no me importa. —Escuché decir a mi amiga.

—Lo siento, pero es que me he dejado la ropa fuera. —Se disculpó encogiéndose de hombros.

Vi como cogía la ropa y segundos después volvió a meterse en el baño.

—Normal que tardes en venir —Volví a poner mi teléfono frente a mí—, con ese hombre a mi lado yo también aprovecharía al máximo. —Vi como Liv se abanicaba.

—Te acabo de decir que tengo concierto esta noche.

—Claro y después en la cama un festival entero. —Soltó haciéndome reír.

—Lamento decepcionarte, pero no va a ser así. —Negué con la cabeza.

—¿No? ¿Por qué? —Frunció el ceño.

—Jaxon viene de visita y supongo que dormirán juntos. —Me encogí de hombros.

—¿Su hermano? —Asentí—. Bueno, pero hay más sitios en la habitación donde podéis hacerlo —dijo como si nada.

—No pienso hacer eso con su hermano pequeño aquí. —Fruncí el ceño.

—Pues lo hacéis en tu habitación, ya ves tú el problema...

—Eres un caso. —Negué con la cabeza.

—Encima que te busco soluciones para que folles. —Llevó una mano a su pecho, haciéndose la ofendida.