Veintidós; Despertares

9.7K 408 235
                                    

(Importante leer la nota del final)

Desperté cuando sentí algo húmedo en mi mejilla y al abrir los ojos topé con los azules de Ollie, estaba restregando su hocico contra mi mejilla para despertarme.

—Ollie... —Me quejé. Quería seguir durmiendo.

Le empujé un poco, haciéndole caer sobre el colchón a mi lado, o eso creía hasta que escuché un quejido. Entonces me di cuenta: Justin. Abrí los ojos rápidamente y me giré hacia él. Ollie se encontraba sentado sobre su pecho y le miraba curioso.

—Lo siento mucho —Me disculpé rápidamente, cogiendo al cachorro y levantándome de la cama para dejarle en el pasillo—. No entres. —Le advertí antes de cerrar la puerta.

Regresé a la cama junto a Justin, cubriendo mi cuerpo con la sábana. Él suspiró pasando una mano por su cara y entrecerró un poco los ojos, probablemente la luz le molestaba.

—¿Todos los despertares contigo incluyen a un perro? —bromeó.

—Bueno... —Mordí mi labio— de momento solo me ha pasado contigo, así que quizás sea culpa tuya. —Me burlé divertida.

Una amplia sonrisa se abrió paso entre sus labios y se giró mirándome. Mi respiración quedó enganchada en mi garganta por un segundo. Era jodidamente guapo.

—Quizás sea cosa de los dos. —Alzó una ceja.

—Entonces tenemos un problema. —Ladeé la cabeza, con una sonrisa tirando de mis labios.

Él agitó la cabeza y tiró de mi brazo, haciéndome caer sobre él.

—Bueno, podré soportarlo. —Acarició mi espalda antes de unir nuestros labios.

Me acomodé mejor sobre él y llevé una de mis manos hacia su mejilla mientras profundizaba el beso. Sentía sus manos paseándose por mi cuerpo desnudo, dejando un leve cosquilleo sobre mi piel.

Justin no tardó mucho en romper el beso para bajar a mi cuello y yo tuve que morder mi labio para reprimir los jadeos que me causaba con el simple contacto de su lengua sobre mi piel.

"¡Ya estoy aquí!", escuché la voz de Liv y la puerta cerrándose.

—Mierda, es Liv —murmuré apartándome de encima de Justin.

—¿Y qué? —preguntó volviendo a acercarse a mi cuello, dejando nuevos besos sobre éste.

—Pues que no pod-

—¿Blair? —Ahora la voz de mi mejor amiga se escuchaba al otro lado de la puerta.

—¡No abras! —Me apresuré a decir.

—¿Por qué? —preguntó extrañada—. ¿Estás bien?

—¡Estamos perfectamente, gracias Liv! —contestó Justin, dejándome totalmente sorprendida.

—Ohh... —Escuché la risa de mi mejor amiga— Entonces supongo que me iré a dar un paseo con Ollie... quizás tarde una hora o así, tomaos vuestro tiempo, repetid... haced lo que querías.

—Dios... —Dejé caer mi cabeza contra la almohada, totalmente avergonzada mientras Justin reía.

—¿Ves? Problema solucionado. —Sonrió antes de besarme.

Al separarnos tiré de su labio inferior, sacándole un pequeño gruñido.

—Eres increíble. —Negué con la cabeza.

—Suelen decírmelo. —Me guiñó un ojo antes de colocarse sobre mí.

De nuevo bajó sus besos hacia mi cuello, pero no se conformó con aquello sino que continuó descendiendo. Sus labios acariciaron el valle de mis pechos y lamió mi vientre antes de que su cabeza desapareciese bajo la fina sábana que había cubierto nuestros cuerpos desnudos. Arqueé mi espalda cuando su boca se puso en contacto con mi intimidad y una de mis manos se dirigió hacia su pelo, agarrándolo entre mis dedos y tirando un poco de él.

Teenage Dream • jb [1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora