49

19 2 0
                                        

- Mi madre.. Dijo Zac tomando sus heladas manos.

- Descuida mamá nos cuidará siempre, ella me lo prometió. Dije abrazando a mi hermano.

- Y ahora ¿qué sigue?. Preguntó Meli.

- Pues..

Iba a responder a su pregunta cuando sentí que todo se movía y de repente mi vista se puso de color negro. Sacudi mi cabeza al no entender que sucedía pero cuando reaccioné pasó algo que jamás me imaginé.

-¡Shanodee! Hija parate carajo que es muy tarde. Escuché la voz de mi madre abriendo de par en par las cortinas.

Por un momento pensé que definitivamente estaba enloqueciendo pero no, todo era real.

-¿Que rayos?. Dije abriendo mi ojos poco a poco.

- Listo en definidas cuentas ¡no iras a la fiesta!. Dijo mi mamá saliendo de mi habitación aventando la puerta con un fuerte golpe.

No podía creerlo, entonces todo había sido.. ¿Una pesadilla?. ¿Jamás sucedió todo eso que "viví"?.

Me senté en mi cama y observé todo a mi alrededor, todo estaba normal pero aún así no salia de mi asombro.

- Mierda.. Sólo fue una puta pesadilla. Dije levantandome de la cama y exponiéndome al sol, el cual no hacia ningún efecto en mi.

Salí de mi habitación y bajé a la sala y ahí estaban todos, mi hermano Kingston quien se encontraba desayunando en la mesa su acostumbrado cereal, mi otro hermano Dethsky sentado en su sillón favorito y desde luego Zachary preparando uno de sus platillos favoritos.

-Miren quien bajo por fin. Dijo Kingston

Salí corriendo desde las escaleras hasta la cocina a abrazar a mi hermano, Necesitaba saber que lo que estaba viendo era real.

-¡Zachary!. Dije abrazándolo.

-Emm ¿sucede algo?. Preguntó mi hermano a quien seguro le pareció extraño mi gesto ya que yo nunca era tan afectiva con él.

-Nada.. Sólo quise abrazarte. Dije sonriendo para mi misma.

-¿Segura?. Insistió devolviéndome el abrazo.

-Sí, segura. Dije.

-¡Shanodee!. Escuché a mi mamá gritar desde el piso de arriba.

-Aquí estoy. Respondí desde la sala.

Ver a mi madre asomarse y ver a esa bella mujer morena con sus hermosos rizos bien definidos, sentí la mayor expresión de felicidad al ver que ella estaba ahí conmigo.

-¡¡Mamá!!. Dije subiendo lo más rápido que pude igualmente para abrazarla.

-Es que ¿tengo que gritarte para que te levantes?. Preguntó molesta.

-Me alegra que estés bien. Dije conteniendo las lágrimas.

-¿No habría por que estarlo?. Dijo.

-Claro que si habría porque estarlo. Dije viéndola con una sonrisa de punta a punta.

Después de soltar a mi madre me fui a mi habitación, me senté en la cama a pensar en todo lo que había soñado desde la fiesta hasta la muerte de mi madre, realmente pensé que toda era real pero menos mal que no. Busqué mi celular y revisé si tenia mensajes de Jeremy y si tenia diez llamadas perdidas, cuatro mensajes y dos notas de voz.

*Mensaje de Jeremy*
Buen día amor he despertado muy emocionado por éste día pasaré por ti a las once, alistate y esperame en tu casa, te amo.

Inmortalidad Maldita IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora