detention room || lee jeno

sesenta y cinco.

Caminábamos por la calle, cada uno hacia su casa, aunque de momento íbamos por el mismo camino. Nuestros hermanos iban jugando más adelante, pero siempre a nuestra vista. Me gustaba que se preocupara tanto por su hermana. Era tan... no sabía cómo describirlo.

Habíamos estado todo el camino hablando. Yo le mandaba indirectas, las cuales de verdad se me hacían difíciles de decir, pero él no pillaba ninguna. ¡¿Cómo podría hacerle saber que me gustaba?! Era realmente difícil. Yo no tenía experiencia mandando indirectas, y estaba segura de que él tampoco tenía experiencia captándolas.

Llegamos a la puerta de mi casa.

"Tengo que irme. Jeno, recuerda, no dejes que tu hermana se sienta sola." dije. Asintió. Lo besé en la mejilla. Él estaba avergonzado, de nuevo, pero esta vez yo también lo estaba. Entré en casa con mis hermanos.

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Buscaba a Renjun por los repletos pasillos. Ni siquiera ayer le había quedado claro a Jeno que me gustaba, aun con las indirectas y cuando le besé en la mejilla. Necesitaba ayuda, ayuda de alguien que siempre estuviera con él, que lo conociera bien.

Lo encontré. Caminaba junto con Haechan y Jaemin.

"¡Renjun!" dije, al llegar a donde estaba él. Dejó de andar y me miró. "Renjun, necesito tu ayuda." le pedí, como si mi vida dependiera de ello. Su expresión facial cambió enseguida a una de preocupación. "Bueno, quizás haya sido un poco exagerada. Pero necesito que me ayudes."

"Sí, fuiste un poco exagerada. ¿Qué pasa?"

Lo tomé de la muñeca y lo llevé conmigo a una clase vacía. No quería que todas las personas que pasaban lo escucharan.

"Verás. ¿Recuerdas ayer, cuando mis amigas te señalaron?" asintió. "Bien, fue porque yo les dije que me gustaba alguien, pero no les dije quién, y creyeron que eras tú cuando me saludaste-"

"Es Jeno, ¿verdad?" dijo, con una sonrisa de lado.