detention room || lee jeno

siete.

"No tienes que preocuparte por eso. Sabes que puedes quedarte en mi casa cuando quieras." ofreció. Le sonreí.
Seguimos hablando en el parque por el resto de la tarde.

Yukhei era mi mejor amigo. Llevábamos cinco años conociéndonos. Yo le había ayudado con la lengua y la cultura coreana, ya que vino de China con su padre sin saber nada de ello.

Recuerdo que a veces hablábamos sobre aquel grupo. A él también le parecía curioso. Algunos de ellos estudiaban en su instituto, incluso uno de ellos compartía clase con él, aunque nunca habían hablado. Dice que él siempre se sienta al final de la clase sin hablar con nadie. Me preguntaba por eso si el chico del aula de castigo también haría eso. Cada vez me intrigaba más. Había estado toda la tarde pensando en ello sin darme cuenta. ¿Por qué me interesaba tanto?

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Llegué pensativa a mi casa. Eran ya las 8 de la tarde, y estaba cansada. Comencé de nuevo a pensar sobre aquel grupo que me resultaba a veces inalcanzable. Aquel chico se había pasado toda la hora de castigo mirando hacia mi dibujo o hacia mí, y eso me dejó pensando.

¿Sería esa la razón por la que todo el mundo intenta acercarse a ellos? Quizás los demás les encontraban tan intrigantes que querían saber más de ellos, al igual que yo. Otros, quizás, solamente quisieran acercarse a ellos por ganar popularidad, o tal vez porque querían entrar a aquel grupo. Pero, por lo que se veía, ellos tenían muy claro que no querían más miembros, o eso parecía.

Pero, también me preguntaba... ¿Qué había en mí que tuviera a aquel chico tan intrigado? Notaba que me miraba con interés e intriga, por alguna razón. En todo caso, la que le tendría que mirar de aquella manera sería yo a él.