ENGLISH MAFIA II: RESURRECTION | Harry Styles

The Place Of The Heart

El momento llegó. Justo ese que estaba esperando pero que al mismo tiempo temía. Estoy nerviosa, aunque no debería, porque sé todo lo que tengo que decir y no tiene que importarme nada más.

Mi madre se irá mañana. Y hoy es el día en el que tengo que hacerle saber que estoy con Harry de nuevo.

Ya pasaron unos días desde que me enteré que Draco está con Harry y que Hannibal trabaja para él. Me ha costado mucho trabajo quedarme callada a pesar de que fue lo que me propuse. He estado tentada a preguntarle a Harry acerca de Draco, pero tengo que contenerme y actuar como si nada estuviese pasando.

Todavía no puedo encontrar una razón por la cual no me dijo que Draco está con él.

En fin, sólo espero que las cosas sigan como siempre y que en algún momento me lo diga.

No he tendido ningún tipo de contacto con Zayn. He intentado acercarme a él en la universidad, pero siempre que me ve venir se aleja. Me duele su rechazo, me duele que después de ser tan unidos ahora él actúe como si yo fuera una completa extraña.

Le hice saber a Becca acerca de la reacción de Zayn y su respuesta fue algo cruda.

Dijo que Zayn es el que debe encontrar amor propio y dejar de humillarse. Hasta ella me dijo en la cara que aún está enamorado de mí y que lo único que siente son celos, por eso actúa de ese modo.

Lo único que quiero es que esté bien, y si el que ya no quiera ser mi amigo es la mejor opción, pues tendré que aceptarlo. Aunque sé que será muy difícil.

Harry y yo vamos camino a casa. Ambos estamos sumidos en nuestros propios pensamientos y, a pesar de que no me lo dice, sé que también está un poco nervioso.

Estuvimos mucho tiempo en la cafetería que está cerca de casa, hablando algunas cosas, pero jamás lo hicimos acerca de lo que se supone que le diremos a mi madre.

Por mi parte, no hace falta repasar mis palabras, porque pienso ser muy sincera. Voy a haberle con la verdad, sin enredos ni complicaciones.

Debo admitir que tengo mucho miedo de su reacción, todavía puedo recordar la expresión en su rostro cuando recién había vuelto y Harry puso en marcha su plan contra Alexander. La forma en la que hablaba de él, como si estuviese hablando de un monstruo legendario del cual todos temen.

Harry aparca el auto fuera de casa y ninguno de los dos da señales. No nos movemos, ni tampoco decimos nada, sólo se escucha el ruido de nuestras respiraciones.

De pronto, su mano busca la mía y entrelazamos nuestros dedos con fuerza.

—Todo estará bien— aseguro, después de unos segundos más de silencio— no me importa si no acepta el hecho de que estoy contigo de nuevo. Te amo y eso es lo único que importa.

—No voy a pedirte que dejes de lado a tu familia por mí— habla en un tono muy bajo, casi susurrando— no vale la pena que renuncies a tanto por tan poco.

—Harry por favor, es mi decisión. Eres todo lo que quiero en la vida, y como ya te lo dije, ya estoy lo suficientemente grande y mi madre no me puede prohibir nada.

Aparta su vista de mí y la posa al frente.

—¿Te arrepientes de hacer esto?— pregunto, apartando mi mano de la suya.

—No— responde sin mirarme— pero no es justo que...

—No es justo que iniciemos una discusión por algo que ya teníamos planeado— salgo del auto sin dejar que hable. Él tambié lo hace y enseguida se acerca a mí.

—No vamos a discutir— su brazo se enrolla en mi cintura y me me recarga sobre el auto— pero no quiero que tengas problemas con tu familia por mí, no vale la pena.