—Supongo que entonces ya no tienes amigos— el tono burlon de su voz me resulta un tanto molesto— creo que no estás hecha para tener amigos hombres.
—Creo que no estoy hecha para nada— respondo irritada— cada vez que quiero hacer algo, siempre sucede algo que me lo impide.
—Debes tranquilizarte amiga— dice recargando su espalda en la enorme cabecera de su cama— todo estará bien.
No quise hablarle a Harry después de la dramática escena con Hannibal. No ocurrió nada que no pudiera controlar y no quería molestarlo.
Todo es mi culpa por aceptar esa salida. La situación con Hannibal esta cada vez peor y me temo que ya no podremos ser amigos. Quisiera que por lo menos un momento entendiera que no habrá nada entre nosotros.
Pero no, no le interesa.
Y yo no estoy dispuesta a seguir lidiando con eso.
Estoy con Becca en su habitación. El pequeño Noah duerme en la suya y por alguna extraña razón yo no tengo sueño.
Le conté todo lo que pasó hace un rato con Hannibal y como siempre, no puede tomar el asunto con seriedad. Siempre tiene que decir algo gracioso o fuera de lugar.
—Lo único que va bien es mi relación con Harry— digo, dejándome caer de espaldas en el colchón— lo cual es un poco extraño y una señal de que en verdad estamos mejorando. Y aunque me sea difícil admitirlo, me asusta.
—¿Por qué eres así?— una mueca de desagrado la asalta— maldición, cuando algo va bien en tu vida siempre lo cuestionas.
—Es que nunca me pasan cosas buenas— me elevo sobre los codos— y la relación entre Harry y yo es demasido buena para ser verdad.
—Ya basta— estira su brazo y me jala un mechón de pelo— no sigas más, cállate.
—Es sólo que...— suspiro— tengo miedo.
—No lo tengas. Él te ama y tú a él, es lo único que importa.
—Claro que sí— me incorporo de nuevo— espero que eso sea suficiente.
—¿Y ahora de qué estás hablando?
Sé que el sexo es algo que debe salir sobrando en una relación, pero desafortunadamente, yo no lo veo de ese modo. No puedo evitar sentir culpa por no poder tener relaciones sexuales con Harry.
Las ganas no faltan, porque demonios, siento que no puedo controlarme. Y sé que él tampoco.
Quisiera poder complacerlo, he pensado muchas veces en pasar por alto el hecho de que no puedo tener sexo y hacerlo de manera desenfrenada.
—No podemos tener sexo— respondo al fin— esta prohibido, al menos hasta que termine el tratamiento.
—¿Y...
—Me siento culpable— admito— me ha dicho que no debo sentirme de ese modo, pero no puedo evitarlo. Y a pesar de que hace todo lo posible por hacerme sentir bien diciendo que el sexo no es importante, sé que también tiene la necesidad de hacerlo Becca— digo— y me siento muy mal por no poder dárselo.
—Querida, hay otras formas de hacerlo sentir bien.
—Pues no conozco muy a fondo esas formas
—Eres tan ingenua— pellizca mi mejilla con sus largos dedos— puedes intentarlo con algo más oral.
—Eres...— suelto una risa nerviosa— debe ser una broma.
—No lo es— rueda los ojos
— el sexo oral es lo segundo más delicioso.
ESTÁS LEYENDO
ENGLISH MAFIA II: RESURRECTION | Harry Styles
Fanfiction"(... )Así pues, refrenó las inclinaciones de su corazón y no se permitió concesiones a la piedad. El siguiente sentimiento que se apoderó de su alma fue una absoluta maldad".