Capitulo nueve

10.3K 944 78
                                    

   POV Christian

- Un dólar por tus pesamientos- le digo a Ana, que mira pensativa por la ventana del auto.

Ella se voltea a mirarme y me sonríe. Pero no dice nada.

Entramos al estacionamiento del escala, y Ana sigue sin decir nada.

- Hemos llegado.

Mientras salgo del auto, Taylor abre la puerta para que Anastasia salga. Caminamos hasta el ascensor, y antes de que las puertas del ascensor se cierren, aparece un hombre de unos veinticinco años aproximadamente.

- Buenas noches.- dice amablemente mirándome a mi, y luego recorre con la mirada a Ana.

- Buenas noches.- responde Anastasia.

- Soy Noah Logan, mucho gusto.- tiende su mano ¿alguien le pregunto su nombre?, a regañadientes lo saludo

- ¿Viven aquí?- Pregunta mirando a ¡Mi Ana! Será mejor que no sigas mirando a mi Anastasia, si no sabrás quien es Christian Grey, cuando miran lo que es suyo.

- Si... yo soy Anastasia Grey; y el es mi marido, Christian Grey.- Como lo escuchaste idiota ¡Soy su marido! Aunque sea una mentira.

- Un gusto.- dice el idiota sin quitarle la mirada a Ana. Atraigo a mi "esposa"  mas cerca de mi, y rodeo su cintura con mi brazo.

- ¿A que piso van? Yo voy al piso veinte.-

- Al atico... debo introducir un codigo.- le digo cortante.

Llegamos al piso veinte, y el ascensor se detiene, abre las puertas y el idiota sale, no sin antes decir;

- Un gusto en conocerte Anastasia...

- Señora Grey.- Lo reprendo.¿Quien le dio confianza, para tutear a Anastasia?

- Disculpe.- sonríe el hijo de puta.

- Nos vemos.- responde Anastasia ¿Cómo que nos vemos?

El ascensor sigue subiendo, marco el código.

- No hagas eso... me molesta y mucho.

- ¿Que cosa?- Pregunta Ana frunciendo el ceño.

- Lo que acabas de hacer con el idiota ese.-

- No hice nada. No entiendo de qué hablas.- se defiende.

- Coqueteaste con él. - le digo con voz dura.

- No coquetee con el, solo fuí amable.- dice horrorizada, incluso dolida.

- No quiero que coquetees con ningún hombre, que no lo mires, que no seas amable y que no...

Las puertas del ascensor se abren, y Anastasia sale rapidamente, y se encamina hacia la habitación.

-¡Anastasia!- ¿Se ha atrevido dejarme prácticamente hablando solo? No puedo aceptar esas faltas.

Llego a la habitación, y Ana me fulmina con la mirada.

- ¡¿Por que me dejas hablando solo?!- Ella pone los ojos en blanco.

-¿Me haz puestos los ojos en blanco?-  Segunda falta, merece un castigo.

-Si lo hice, ¿y qué?- Me réplica altanera.

-Fíjate como me hablas, Anastasia...

-¡Y un cuerno!- vuelve a rezongar.

Ya perdí la poca paciencia que tenía y tiro de su brazo con fuerza. Ella trata de soltarse y hago mi agarre más fuerte. La llevo hasta el borde de la cama, y con la mano que tengo libre me quito la corbata.

—¡No te voy a permitir que me hables así y que me pongas los ojos en blanco, además estabas coqueteando con un imbécil en mi cara y me alzas la voz.

Ella balbucea y la arrojo en la cama. Con mi corbata le ato las manos a la espalda para que no se pueda mover.

—Me has faltado al respeto y te mereces un castigo...

—¿Qué? ¿Un castigo? ¿De qué estás hablando?- balbucea y se escucha espantada, -Christian, suéltame...

Ignoro su petición, u orden, o lo que sea y le levanto el vestido y quito sus bragas de un tirón. Ahora más que excitado, estoy furioso. Ella tiembla, pero no me importa. Doy el primer azote y ella chilla.

—¿Qué haces? ¡Basta, Christian!

Doy el segundo azote y ella gime y se retuerce sobre la cama. Doy el tercer azote y ella gime más alto. Doy el cuarto azote y veo como su trasero toma un tono rojizo después de cada golpe, esto es gratificante. Ella se retuerce con más impetú. Y por ultimo le doy el quinto azote. Esto es lo que necesitaba, liberar esta carga, ahora ya sabe que no debe provocarme.

—¡Ya suéltame, Christian!- chilla de nuevo y escucho su voz entre cortada.

Me aparto y veo que está temblando, hipa y sirve por la nariz. Le libero las manos de la corbata y le tomo de los hombros para ponerla de pie. Al hacerlo ella se aparta de mi agarre y me mira. Tiene los ojos rojos, llenos de lágrimas, me mira con tristeza, furia y decepción. Me duele que me mire así, y me hace darme cuenta de que la cagué.

- Anastasia- digo con miedo, ¿qué me pasa?  Siempre vi a mis sumisas llorando desconsoladamente, a causa de mis castigos, pero nunca me importó.  Pero ahora ver a Anastasia, humillada, mirándome con odio, me está haciendo sentir mal.

Ella retrocede hacia atrás.

- Anastasia- vuelve repetir

- No- dice negando con la cabeza. Estoy en caída libre, ella no es mi sumisa, esta aquí por una mentira, por que cree que es mi esposa.

- Ana- paso mis dos manos por mi pelo, me siento avergonzado por lo que acabo de hacer.

- ¡Nunca mas, vuelvas hacerme eso!- Espeta, y siento como si me hubiera dado un puñetazo en el estomago haciendo daño.

- Yo...yo- no se que decirle.

Ella se encamina hacia el baño, abre la puerta, entra y vuelve a cerrarla. Dejándome solo, desconcertado. Sin saber que hacer.

¡Haz algo Grey! ¡Ella no es tu puta, ni tu sumisa! Debo decirle la verdad, debo acabar con todo esto ya, aunque no me guste reconocer, ella esta despertando sentimientos en mi, y no me gusta nada. Será mejor sacarla de vida.

Capitulo dedicado a  La_dama_Roja

SOY  TUYA GREY (fanfic Grey)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora