SOY TUYA GREY (fanfic Grey)

Capitulo cuarenta y tres

POV ELENA.

Parpadeo varias veces...¿En donde estoy? Estoy en tumbada en una cama, tengo una intravenosa en el brazo. Estoy en el hospital...¿Como llegué aquí? Cierro mis ojos y trato de recordar. Lo ultimo que recuerdo es que hablaba con Susy, por teléfono. Después llegó Carrick. ¡Ya lo recuerdo! El me ahorcó, luego me bofeteó, me tiro al suelo, y lo ultimo que recuerdo es que de forma violenta me penetro. ¡Ese maldito me violó!

- Señora Lincoln, que gusto que despertó- es una enfermera ¿En que momento llegó?- ¿Sabe donde esta?

- Estoy en un hospital- le respondo con voz débil¿Cree que soy estupida, que me pregunta si se en donde estoy?

- El doctor vendrá a revisarla. Estuvo casi dos semanas inconsciente- me quedo petrificada ¿Dos semanas? ¿Pero como?

- Tengo sed...y un montón de preguntas- le digo. Tengo la garganta seca.

- Iré a llamar al doctor, y le traeré agua- apresurate estupida, le ordeno mentalmente. Me duele todo el cuerpo.

Minutos después entra un hombre guapo, ojos azules, rubio. Este doctor no está nada mal.

- ¿Como está señora Lincoln?

- Dígame señorita- a el parece no importarle. Seguramente este idiota es gay.

- ¿Como llegue aqui? - Le pregunto.

- Una señora llamó a la ambulancia, señora Lincoln, tuvo mucha suerte- insiste con lo de "señora"

- ¿Por que lo dice?-

- Porque estuvo a punto de perder la vida. La golpearon de forma brutal. Supongo que hará la denuncia- por supuesto que denunciaré a ese maldito de Carrick. - Y al parecer también fue violentada sexualmente- maldito hijo de puta. Pensé que solo lo imagine pero realmente ese animal me violó.

- ¿Pueden traerme agua? Tengo mucha sed- le digo.

- Primero la revisaré...después le traerán agua- ¡Maldición! Este idiota quiere matarme de sed...

- Tiene contusiones en las costillas, y en el cuello, rasguño en los pechos, una pierna fracturada.- Maldito Carrick, casi me mataste.

- Deberá quedarse por lo menos una semana mas.- ¡Maldición!...

● ● ●

Hace tres malditos días que desperté, no soporto este maldito lugar, huele feo, y tengo que aguantar a los demás paciente. No sé porque no me llevan a una habitación privada, yo no soy de la misma clase que estos malditos moribundos.

- Señora Elena...¿Cómo esta?- Es mi ama de llaves.

-¡¿En donde estabas, que no venias a verme?!¡Hace tres malditos días que estoy despierta y tu hasta hoy te aparece!-

- Señora, disculpe...es que he estado ocupada.

- No me interesa tu mierda- le recrimino.

- Discúlpeme - baja la mirada.

- ¿Tu me trajiste aquí?- Le pregunto.

- Si señora...yo no percaté lo que el señor Grey le hizo, y cuando llegue a su estudio, usted estaba casi muerta, tenía la falda y las bragas rotas, le había sacado la blusa, su cuerpo estaba todo moreteado, usted no reaccionaba. Me asusté mucho- ahora la maldita se puso sentimental.

-¿Y quiere que te lo agradezca?

- No quise decir eso.- Maldito Carrick, ya veras me vengaré de ti.

- ¿Denunciaste a ese maldito de Carrick?- Sería muy incompetente de su parte, si no hubiera echo.

- No señora-

-¡Maldita inepta!- Le grito, no me importa los demás enfermos.

- Es que ese señor murio hace casi dos semanas- me quedo en shock. El maldito murió. Aunque me alegro, ojala se pudra en el infierno.

- Pero esa es una buena noticia- la maldita ama de llaves abre los ojos como platos.

-¿Te molesta algo?- Le digo al ver que me mira indignada.

- Nada señora...hay algo mas que debe saber.

- Habla.

- Sus salones fueron a remate.-

-¡¿Que mierda has dicho?!- Esto no puede estar pasando. Esto es una maldita pesadilla. Es como si me hubieran tirado una balde de agua helada en pleno invierno. ¿Quien me robó mis salones? Ya se quien...seguramente fue el maldito de Christian Grey, otro no pudo ser. Maldito pero ya verá cuando me levante de esta cama.

POV ANASTASIA

- Bienvenida a su casa...señorita Steele- me dice Christian, poniendo énfasis en señorita Steele.

Observo por unos segundos el lugar, todo es enorme, pareciera que hubiera sido una eternidad que no había estado aquí y no la dos semanas...que realmente fueron. Me siento abrumada.

- Te llevaré a la habitación- me dice Christian, mientras empuja la silla de rueda. Odio ir en esta cosa, pero por recomendación del doctor, tuve que aguantarme y no salir caminando del hospital como yo quería.

Junto con nosotros viene, Nora, una enfermera que me cuidará, también la Doctora Greene, vendrá todos los días a visitarme ¡¿No es demasiado?!

- No se si quiero pasar el resto del embarazo tirada en una cama. Me duele la espalda- le reclamo Christian.

- es por el bebé por favor entiéndelo- uff. Estos casi tres meses de embarazo van hacer una eternidad.

En el dormitorio, Christian, me toma en brazo con mucho cuidado, como si yo fuese un cristal. Y me tumba encima de la cama.

- Me gustaría darme un baño- le ruego

- Mmm, más tarde...debo atender un asunto.

- Pero yo puedo estar en el baño sola.

- No, Anastasia...te quedarás aquí- me ordena con tono de voz frío.

Christian, me da un beso en la cabeza, y ya está...sale de la habitación...hace un par de dias, tengo la sensación que el se está alejando de mi. Pensé que iba quedarse aquí conmigo, pero me equivoqué...cualquier cosa es mas importante para el, que estar al lado de su mujer embarazada, y que ya no podrá darle lo que el quiere. Los ojos se llenan de lagrimas. Me las reprimo, y trato de levantarme de la cama, no pienso quedarme tirada en una cama durante tres meses...

Ya se ha echo de noche, Gail, me obligó a cenar, ahora estoy tirada en la cama, y nada que llegue Christian, mi tarde la pase hablando con mi padre y Kate en el teléfono. Me levanto de la cama...debo hacer pis...

Salgo del baño y me encuentro con Christian, al fin llegó.

-¡¿Que mierda haces levantada?!- Me grita furioso. Mi animo decae de inmediato.

- Solo...fui al baño.

-¡¿Y sola?! ¡¿No pudiste pedirle ayuda a la enfermera o a Gail?! - Vuelve a gritarme

- Me dio vergüenza, decirle que me acompañen al baño- me siento en la orilla de la cama. Solo llevo un camisón de los años treinta.

- ¡Maldita sea Anastasia! ¡¿Es que no te importa, que puedas caerte?!-

- Te recuerdo que no fue por un resbalón que caí por las escaleras- subo la voz, estoy enojada.

- No es necesario que me lo recuerdes- su voz esta cargada de rabia y dolor. Maldición, no debí decirle eso.

- Acuestate...yo estaré en mi estudio- sale dando un portazo. Dejándome con una extraña sensación que cada vez se está alejando más de mi. Quizás deba volver a casa de mi padre. El me haría sentir mejor. Cierro mis ojos para no llorar, pero fracaso, un cúmulo de lagrimas ruedan por mis mejillas.