SOY TUYA GREY (fanfic Grey)

Capitulo cuarenta y cinco

   POV RAY.

Termino de vestirme, ya estoy listo. Solo falta que Kate, pase por mi y viajemos a Seattle. Escucho el timbre en la puerta, ya llegó Kate.

-¿Tu?- Digo atónito, cuando abro la puerta.

- Hola Raymond, ¿Puedo pasar?- Me pregunta, del asombro no respondo. -¿Como has estado?- Susurra entrando a mi casa. Yo no le dije, que podía entrar.

- ¿Que haces aquí Carla?- No pensé, que después de todo lo que sucedió, tuviera el valor de volver.

- Quiero hablar contigo, con mi hija¿Ella está en casa?- Se quita los anteojos negros, está mas delgada, su cara esta demacrada, pareciera haber envejecido unos diez años.

- ¿Como puede tener la desfachatez de venir aquí?- Le recrimino con rabia

- Se que lo que hice no tiene perdón, pero creo que merezco ser escuchada- espeta.

- No mereces nada, no me interesa oirte- le digo con tono de voz duro. La miro, después de siete meses sin verla, ya no siento nada. Si siento algo, rabia.

- ¿Donde está mi hija?- Pone énfasis en <<Mi hija>>

- Anastasia, ya no vive aquí.

- No mientas, no creo que este viviendo con su marido.

-¿Cual marido?¿El que te cogiste, el día del matrimonio? No me digas que recuperaste tu memoria, y te acordaste que tu amante era el marido de tu hija- digo subiendo la voz.

- No es necesario que seas hiriente. ¿Donde está Ana?- Gruñe

- Ya te dije, Ana, no vive aquí.

- Si no me dices, lo averiguaré...no vas impedir que vea a mi hija- maldición, Annie, tiene su embarazo delicado, y no crea que quiera verla. Por la salud de mi hija, y mi nieto tendré que decirle la verdad.

- Te prohibo que la vea, ella no esta bien.

-¡¿Que le sucedió?!- Pregunta asustada.

- Está embarazada, y su embarazo es delicado. - Abre los ojos como platos, se dirige al sofa¡Mi sofá! Yo no le dije que podía sentarse.

- Oh...por dios- dice entre dientes, está asombrada. - Ella...ella ¿Estaba embarazada de Paul?- Pregunta horrorizada.

-¡¿Que?! Por supuesto que no- se queda petrificada- Anastasia, conoció un hombre...y se enamoro de el, tendrán un bebé, pero ella no esta bien, y si te queda algo de decencia, no la veras...la puedes alterar, y eso sería fatal para mi nieto-

- Oh dios- vuelve decir incrédula.- Debo verla- se pone de pie.

- ¿No entendiste lo que te dije? Tu presencia puede alterarla, ni se te ocurra buscarla-

- Es mi hija, y debo estar a su lado- afirma. Me río sin ganas.

- Carla, Carla, Carla ¿Vives en Narnia?¿Tu realmente crees que ella va a permitirte estar cerca, después de lo que le hiciste?  

- Que me lo diga ella, no tu- musita

- No te lo estoy diciendo, te lo estoy exigiendo, te prohibo  que busques a mi hija- no voy a permitir que altere a mi niña.

- Ray, yo sé que tu nunca vas a perdonarme, y tienes razones para no hacerlo, pero si quiero el perdón de mi hija, quiero que me perdone, y tu tienes que ayudarme-

-¿Perdón? ¿Estas pidiéndome ayuda para acercarte a mi niña?- Estoy atónito - ¿Y porque no pensaste en Ana, antes de moverle el culo a tu yerno?