Isabella.
Después del desayuno volvimos a la habitación. Bryan había ordenado que cambiaran las sábanas de nuestras camas ya que gracias a Jos mis hijos las pintaron.
Debo resaltar que la mujer encargada de cambiarlas casi se desmaya al verlas pintadas. Supongo que no será fácil quitarles el color a esas sábanas blancas.
—Solo quería que se viera lindo, mami. —me dijo Claire haciendo un puchero una vez que ya estuvo sin rastro de pintura.
—Lo sé, hija. Pero no lo vuelvan a hacer, ¿entendido? —me dirigí a ambos quienes respondieron asintiendo y se fueron a sentar a la cama.
Estar aquí era aburrido desde que Jos rompió la televisión. Pero tampoco tenía ganas de salir, al contrario, deseaba quedarme a dormir aquí.
Repentinamente un celular comenzó a sonar y noté a Bryan salir apresuradamente de la habitación.
Bien, eso fue igual de sospechoso que lo que sucedió en el desayuno.
Me puse de pie y seguí a Bryan, abrí un poco la puerta y lo miré recargado en la pared a un lado de la puerta.
—Sí, sí. Todo está bien. —escuché que decía. —No, tranquilo. —rodó los ojos. —Nada interesante, tú tranquilo... Ajá... Sí, no le diré. —salí y él se sobresaltó.
—¿Con quién hablas? —Bryan me miraba nervioso.
Te atrapé, Kevin.
—Con... Mi primo Enrique, sí. —arrugué el entrecejo. —Hace tiempo que no lo veo, me estaba contando sobre sus horrorosas hemorroides. —hice una mueca.
—No quería saber eso. —dije y volví a entrar a la habitación.
Pero por supuesto que no le creía ni una sola palabra.
Él sabía algo que no quería que yo supiera que a la vez sé que Alonso sabe pero él tampoco quiere que yo sepa.
Enredado, pero es algo así.
—¡Muero de hambre! —me quejé dejándome caer en la cama, mis dos hijos no tardaron en llegar junto a mí.
—¡No, mami! ¡No mueras! —exclamó Claire angustiada.
—No muero de verdad, cariño. —expliqué y noté como ella soltó un suspiro. —Oigan, cuando su tío Bryan entre pídanle helados, ¿sí? —propuse y ellos asintieron efusivamente.
—¿Pueden ser de varios sabores? —preguntó Braulio, sonreí al notar el brillo en los ojos de mis hijos.
Si hay algo más hermoso en la vida de una madre, es ver a sus hijos felices. O al menos eso es lo que yo siento.
—Claro que sí, en especial de...
—Vainilla. —respondieron ambos al unísono y no pude evitar abrazarlos.
—Exacto, así que vayan con su tío. —les animé cuando vi a mi amigo entrar a la habitación y ellos corrieron hacia él.
Mientras ellos convencían a Bryan decidí darme un baño con agua fría, hace mucha calor por aquí y necesito refrescarme un poco.
Cerré el baño y me dispuse a quitarme el short que traía puesto el cual extrañamente me apretaba. Me hacía sentir incómoda.
Me paré frente al espejo de cuerpo completo que estaba en el baño y me miré detalladamente.
Bien, estoy inflamada. Sabía que esas enchiladas me harían mal.
Agh. Como sea, ya se me quitará.

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My King #2
Fiksi Penggemar2DA TEMPORADA DE "The Prince" ⚠NO LEER SIN LEER LA 1ª TEMPORADA.⚠ --------------------------------------------------------- Isabella Moro no se imaginaba casada a tan temprana edad, y mucho menos con el chico al que solía detestar. Problemas y drama...