Ayúdame. (Edward Cullen) Parte 2

¿O qué?

Narra Ally

Marzo

-Explicate.-Dijo Jasper confuso.

-No Jasper, que te explique Edward.-bajé de nuevo a la entrada y volví a sentarme al lado de Isac. Callada y analizando lo que acababa de pasar sin entender nada, no sabía que decir.

-¿Por qué no quiere? ¿No estará celoso, verdad?- Isac me miraba también sin comprender que estaba pasando.

-No lo sé...-dije en un suspiro.

Una sonora carcajada rompió el silencio.-¿Cómo puede estar celoso de mí? ¿A caso no se da cuenta de que me estás rechazando por él?

-Tú mismo has visto mis recuerdos. Edward siempre piensa qué cualquiera sería mejor para mí que él. Él es así, inseguro, cree ser honesto y cree protegerme pero aunque no lo haga con mala intención es egoísta.

-Cree que no es lo bastante bueno para ti.- Dedujo casi para sí mismo.

-Algo así... sí.

-Hipócrita... No me puedo creer que no sepa ver lo que tiene delante... ¿Y si en vez de venir él voy yo?

-¿Tantas ganas tienes de conocerlo?

Isac asintió.

-Está bien, ven entonces.-dije poniéndome en pié. Él vino detrás de mí y me siguió escaleras arriba.

-¿Dónde está Edward?-dije una vez en el salón donde estaba la mayoría de mi familia.

-Ally no es buena idea.-recomendó Alice. Me estaba poniendo muy nerviosa el secretito que guardaban.

-¿Podéis explicarme qué problema tenéis con Isac?-Estaba indignada, merecía saber que estaba pasando y nadie quería hablar, como si el tema no fuera conmigo.

Cuándo todos comenzaron a mirarse unos a otros supe que el misterio ya no era entre Alice y Edward, ahora lo sabían todos menos yo.

-Cuidado, no sea que el chico de los juegos mentales hurgue en vuestra mente, ¿no es eso lo que haces Isac? -dijo Edward apoyado en la escalera, quién apareció de repente.

-Mira tú quién viene a hablar de juegos mentales.-dije yo sarcástica y él rodó los ojos. -Una de dos, elegid, o me decís que está pasando o...-en milésimas de segundo Edward estaba a mi lado agarrándome el brazo.

-No.-afirmó, la broma había acabado en el momento en el que vio lo que era capaz de hacer.

-Eh, suéltala.-dijo Isac con un tono autoritario.

-¿O qué?-dijo Jasper queriendo escuchar mi segunda opción.

-O se va con Isac.-confesó Edward.

Yo me zafé de su agarre bruscamente y con cara de pocos amigos. -Cállate.- Le ordené a la vez.

-No.-declaró Jasper nervioso.

-¡Ally!-dijo Rosalie decepcionada.

-Decidme qué está pasando, ya.

-Lo que pasa es que Isac no es quien tú crees que es, y tampoco está aquí para verte y para decirte lo mucho que echa de menos su anterior vida contigo.

Miré a mi exprometido confusa.

-Vale, quiero una explicación, ya, o salgo por esa puerta y no me veis nunca más.-dije mirando ahora a todos los miembros de mi familia.

-Que te la dé él.-Propuso Carlisle todas las miradas se dirigieron a Isac.